Jamile Rolón presentó una demanda por estafa contra “G5 Pro”, la productora que se vio envuelta en numerosas críticas tras el concierto de Bud Bunny y la suspensión del Kilkfest. La joven relató que no le quisieron devolver el importe de una entrada para el Asunciónico, que ella había adquirido de una empleada de la firma.
Dicho festival fue suspendido también por lluvia. Cuando Jamile intentó que se le devuelva el importe de la entrada o se la canjeen por otro evento, se encontró con la sorpresa de que la funcionaria le dijo que era una entrada de “cortesía” que les daban a los empleados de G5 y que no le podía devolver su dinero.
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Relató que la vendedora estaba dentro del espacio habilitado por G5 para devolver las entradas y los demás trabajadores también se negaron a hacerle la devolución.
“Me trataron súper mal (los empleados de G5), me dijeron que eran de cortesía y por nada del mundo me iban a devolver”, relató. Además de la denuncia, planteó un reporte ante la Secretaría de Defensa al Consumidor, puesto que la productora está envuelta en numerosas quejas por mala organización en eventos de gran magnitud.
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Demanda colectiva a G5Pro: juntan firmas digitales
En ese sentido, la joven confirmó que se encuentra juntando firmas digitales para luego plantear una demanda colectiva, con el objetivo de que G5Pro ya no pueda organizar eventos, atendiendo al tiroteo en el Ja’umína Fest, donde asesinaron a dos personas, además de las constantes suspensiones, desorganización y venta de entradas por encima de la capacidad de los estadios.
Las firmas están siendo recolectadas primeramente a través de la plataforma Change (www.change.org), donde esta mañana ya 970 personas firmaron para que la productora del conocido Coto Nogués deje de organizar conciertos.
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