En la ciudad de San Joaquín la ciudadanía sigue preocupada por la suerte del templo parroquial, una reliquia que viene de los tiempos de las misiones jesuíticas. El templo de San Joaquín fue construido en 1746.
El paso del tiempo no mostró clemencia por la edificación. Y peor aún la inclemencia de la naturaleza: intensas lluvias caídas en los últimos seis años terminaron por causar estragos en la frágil estructura de adobe.
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En los últimos seis años, parte del techo y sectores de las paredes de adobe se vinieron abajo. Las reliquias debieron ser sacadas a los apurones y puestas a resguardo en la Municipalidad.
A partir de la caída de sectores de la estructura, el clamor de la ciudadanía de San Joaquín subió de tono exigiendo al Estado la salvación del templo.
La Secretaría Nacional de Cultura, autoridad de aplicación en el tema, respondió con una lentitud desesperante. Cada lluvia traía consigo la premonición de que al día siguiente el templo ya no estaría en pie.
Diputados declaran “Patrimonio nacional”
El 2 de setiembre de 2017 la Cámara de Diputados, según resolución 634, declaró al templo “Patrimonio Nacional”.
La iglesia de San Joaquín no es un patrimonio exclusivo de la ciudad: forma parte del acervo histórico de nuestra nación. La histórica construcción tiene además otra característica: es el único templo jesuita del tiempo de las misiones que sigue activo como parroquia en el mundo.
Gustavo Bazán, miembro de la comisión pro restauración del templo, explicó que “la Secretaría Nacional de Cultural estableció una intervención de urgencia. Se construyó una suerte de sarcófago, al estilo Chernobyl, y se cubrió por completo la construcción en peligro”.
Agregó que “el costo de la protección superó los dos mil millones de guaraníes y entregaron el 22 de febrero último. Al momento de concluir la obra prometieron iniciar la restauración del templo, por etapas, en un período máximo de dos meses. Pasaron siete meses y aún no tenemos novedades”.
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El 30 de agosto pasado, la comisión pro restauración solicitó a la municipalidad la aprobación del plano y el plan de trabajo para la restauración del templo jesuítico.
Aguardan licitación
Al día siguiente, el municipio otorgó su visto bueno al documento y se remitió copia a la Secretaría Nacional de Cultura.
“Estamos aguardando el llamado a licitación –siguió diciendo Bazán– para que comiencen las obras de restauración. Solo esperamos que no tarde el tiempo que llevó la intervención de emergencia con el levantamiento de un tinglado encima de la iglesia”.
La burocracia estatal es motivo de preocupación en San Joaquín: “Estamos en vigilia permanente, dispuestos a llegar a Asunción para hacer escuchar nuestro reclamo de restaurar el templo de San Joaquín”.
La Secretaría Nacional de Cultura, cuyo titular es Rubén Capdevila, es responsable de impulsar una licitación que puede salvar al templo de San Joaquín de su destrucción.