La jueza, Claudia Domínguez, ordenó el embargo del estadio del club General Díaz por una demanda presentada por el entrenador, Daniel Eduardo Raschle, que nunca trabajó en el General Díaz, pero que habría prestado un monto de dinero al club que intentó cobrar, cuya suma ascendía a G. 1.000 millones aproximadamente, desde el año 2012, hasta el 2020.
El remate fue ejecutado el pasado 26 de agosto mediante una subasta pública por G. 25.100 millones y el beneficiado fue la Conmebol.
Hinchas del club General Díaz, que compite actualmente en la Primera B de la Asociación Paraguaya de Fútbol, ya realizaron varias movilizaciones para reclamar una mesa de diálogo con la comisión directiva del club y conocer así los motivos de la millonaria deuda, así como también saber por qué no se pagó dicho préstamo, hasta el punto de perder el legendario estadio “Adrián Jara”, ubicado sobre la calle General Aquino, en inmediaciones de la Conmebol.
En la noche de este lunes, los simpatizantes se movilizaron para exigir a las autoridades competentes investigar el endeudamiento, los pagos que se harán con el dinero del remate y el uso del saldo de la venta. También piden la anulación del remate.
Los manifestantes acusan al actual presidente del club, Jorge González, de “entregar” el club General Díaz y lo declaran “persona no grata”, pidiendo su renuncia.
La movilización se llevó a cabo alrededor de las 17:00 horas y la calle Leonismo Luqueño fue bloqueada. Agentes de la Policía Nacional dirigieron el caótico tráfico sobre la intersección de las avenidas General Aquino y Sudamericana.
“Exigimos que anulen el remate. Que el caso vuelva a foja cero, que se investigue. Le pedimos a la Conmebol que recapacite, necesitamos recuperar el estadio. La gente de la comunidad nos enteramos cinco días antes del remate, no pudimos hacer absolutamente nada. Nunca hubo apertura por parte del presidente. No sabemos de dónde salió esa deuda, pedimos una auditoría. Estamos en condiciones de negociar con los deudores del club y ver qué podemos hacer para no perder el estadio”, dijo Nelson Cardozo, manifestante.