En un informe final de fiscalización inmediata que la Contraloría General de la República (CGR) realizó a la Industria Nacional del Cemento (INC), descubrió que la cementera estatal hizo pagos irregulares en el marco del contrato para “Montaje Mecánico, Eléctrico, Electrónico y Civil para Puesta en Marcha del Ventilador Tiro Horno III” de la fabrica de Vallemí.
La empresa CIE S.A., representada por Hugo Ángel Aranda Núñez, fue adjudicada para ejecutar esta tarea por G. 8.377 millones y se ejecutó en el 2021. En este sentido, el ente contralor reveló que la empresa pública hizo figurar mayores cantidades de obras que las que fueron ejecutadas realmente, lo que representó un desembolso que supera los G. 1.403 millones que no se pudo justificar.
“Se verificó la certificación de ítems en cantidades distintas a las ejecutadas, lo cual derivó en una diferencia de G. 1.403.207.996″, resaltó el ente contralor y desglosó los ítems donde hicieron figurar mayores cantidades de trabajos que los que efectivamente se concretaron.
Lea más: Contraloría reveló irregularidades en millonaria compra de clínker de INC
Según Contraloría, INC certificó mayores cantidades que las que fueron ejecutadas
Por ejemplo, en el ítem de “reacondicionamiento de sala eléctrica”, la INC hizo figurar que se ejecutaron trabajos en un área de 40 metros cuadrados, cuando en realidad se ejecutaron en 21,80 metros cuadrados según la CGR; es decir, una diferencia 18,20 metros cuadrados. En este caso, se pagó G. 101.483.200 más de lo que se debía.
También certificaron mayores cantidades que las tareas ejecutadas en la parte de “montaje mecánico de equipos y accesorios del ventilador”. En este caso, la INC certificó que la empresa adjudicada realizó el montaje de 29.500 kilogramos, cuando en realidad fue por 24.405 kilogramos (diferencia de 5.095 kg). Lo cual representó un pago de G. 621.080.500 más de lo que se debía desembolsar.
Asimismo, inflaron el peso en el ítems de “suministro y montaje de ductos de interconexión y soportes”, donde certificaron trabajos por 80.500 kilogramos, cuando en realidad se ejecutaron tareas por 51.659 kilogramos (diferencia de 28.840 kg). Esto se tradujo en un pago de G. 680.644.296 más de lo que debería.
Todo esto suma los más de G. 1.403 millones, que la estatal debe recuperar, según advirtió la CGR. “La INC deberá impulsar las acciones necesarias tendientes a recuperar el monto de la diferencia pagada por cantidades de obra diferentes a las realmente ejecutadas. Asimismo, deberá iniciar una investigación interna tendiente a deslindar responsabilidades y aplicar las sanciones que correspondan”, insistió en ente de contralor.
Lea más: Paro del horno de INC: no se sabe cuándo se reactivará la producción de clínker en Vallemí
Agregaron obras ya previstas en una adenda y con sobreprecios
La Contraloría también detectó que en la adenda N° 2 de este contrato con CIE se incluyeron ítems de obra que ya estaban establecidos en el contrato original. Esto derivó en una diferencia en el monto del contrato ampliado, de G. 604.527.028.
Además los precios de los ítems de la adenda 2, incluyen gastos generales no acordes a los de mercado, inclusive a los del contrato original, lo cual deriva en una diferencia en la valoración del monto ampliado del contrato de G. 165.643.548. “Los funcionarios intervinientes no tuvieron en cuenta el formulario de composición de precios unitarios del contrato original en la determinación de las cotizaciones de los ítems de la adenda 2″, resaltó la CGR.
Lea más: Horno de la INC, que costó millones de los bonos, también está parado
Entre otras cosas, la Contraloría también reveló que se han certificado y pagado ítems de obras, cotizadas con unidades de medidas globales, antes de su terminación. “Debido a la inobservancia por parte de los funcionarios intervinientes del Pliego de Bases y Condiciones, se han realizado pagos anticipados, otorgando así al contratista mayores beneficios que lo previsto”, expresó.
Por último, resaltó que el control interno de la institución relativo a las obras fue deficiente, en cuanto a la implementación del convenio modificatorio con inclusión de ítems de obra que ya estaban establecidos en el contrato original y precios no acordes a los del contrato original y a los del mercado; control de cantidades de obra certificadas, así como la liquidación de rubros de obra con unidad de medida globales antes de la culminación de dichos rubros.
Intentamos contactar con el presidente de la cementera, Ernesto Benítez, sobre este informe de la CGR, pero no tuvimos respuesta del alto funcionario, que usualmente evita responder las consultas de este diario.