En medio de un cerrado aplauso, los participantes de la audiencia pública sobre uso y cultivo de marihuana, realizada ayer en la sede del Congreso Nacional, solicitaron nuevas leyes que permitan el cultivo legal de marihuana.
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Cinco expositores extranjeros, de Uruguay y Brasil, compartieron el relato de sus experiencias en materia del uso del cannabis en sus respectivos países.
En medio del tecnicismo de explicaciones sobre las bondades y beneficios del uso de la marihuana, surgió el relato conmovedor de la señora Cynthia Fariña, referente de la organización Mamá Cultiva.
Reconoció que está violando la ley. “Mi hija sufre de epilepsia. Gracias al cannabis olvidamos los hospitales, el sufrimiento y la angustia de verla en sus convulsiones”.
Agregó: “No podemos seguir siendo criminales por cultivar marihuana para mejorar las condiciones de salud de nuestras familias. Necesitamos una ley que ampare y que incentive la investigación”.
Posicionar el cannabis paraguayo
La ingeniera agrónoma Pilar Milessi es pionera en el estudio del cannabis en Uruguay. En este momento está trabajando como asesora de la cooperativa Agronorte.
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La especialista resalto: “En San Pedro estamos aplicando un modelo de cultivo ecológico y sustentable”.
Agregó que “el cannabis paraguayo puede llegar a tener un mejor posicionamiento en el mercado. La investigación y el mejoramiento genético son fundamentales para la marihuana paraguaya”.
El médico Francisney Nascimento, PHD en farmacología y jefe de investigación de la Universidad Unila, de Foz de Yguazu, resaltó las bondades del uso medicinal del cannabis.
“Las investigaciones científicas permiten comprobar el beneficio del cannabis en el organismo, para el tratamiento de diversas enfermedades. La marihuana permite tratar con éxito diversas enfermedades” expresó ante el auditorio el científico brasileño.
“Aprender de nuestros errores”
El ingeniero Sergio Vázquez, funcionario del Ministerio de Agricultura de Uruguay, mencionó que “en los inicios del proceso cometimos muchos errores y fuimos aprendiendo por el camino”.
“Paraguay tiene que aprender de nuestros errores - siguió diciendo - para no cometer nuestros mismos pecados. De esta forma podrá avanzar mucho más rápido lo que nosotros lo hicimos en Uruguay”.
Señaló la importancia de revisar en forma continua la normativa relacionada al cannabis “porque las reglas de mercado cambian y debemos adaptarnos a ellas”.
Mencionó como ejemplo la incursión del cannabis en el ámbito de la alimentación, rubro en el cuál se registra un notorio crecimiento.
En contrapartida, los precios de la flor del cannabis se derrumbaron por un exceso de producción en Europa del Este.
“No tiene sentido cultivar un rubro que no tendrá mercado, genera daño y desconfianza entre los productores” enfatizó.
Juan Carlos Fisher, presidente de la Cámara Paraguaya de Cannabis, se mostró optimista ante la posibilidad de que Paraguay pueda tener un nuevo marco jurídico para el uso y cultivo de la marihuana.
Diversos referentes de la sociedad civil organizada y movimientos campesinos reclaman la legalización del cultivo de marihuana.
Y reivindican el uso del aceite cannábico de fabricación artesanal.