La decisión del Gobierno de Jair Bolsonaro de reducir el impuesto a la circulación de mercaderías y servicios (ICMS), en el segmento aplicado a combustibles, energía, telefonía e internet, con una cuota que podía variar del 18% al 35% a discreción y que quedó fijada entre 17% y 18% como máximo lo que permitió reducir el precio de los combustibles.
Con los nuevos precios, cientos de automovilistas paraguayos optaron por abastecer sus vehículos en las estaciones de servicios del vecino país. Desde la semana pasada se notó una gran afluencia de vehículos con chapa paraguaya en los servicentros del lado brasileño.
“Es mucho lo que se pude ahorrar”
“Es mucho lo que se puede ahorrar, ya que con el cambio actual hay una diferencia de entre 1700 a 2000 guaraníes por litro”, dijo un motociclista paraguayo que acababa de llenar el tanque.
“Los gobiernos deben pensar en su pueblo y es lo que está haciendo el gobierno federal. Esperamos que sea duradero porque nuestra economía quedó por el suelo a causa de la pandemia”, explicó una cliente que aprovechó para agradecer al presidente brasileño.
“Alrededor de 60% de los clientes son paraguayos. Aumentaron muchísimo nuestras ventas y estamos felices por poder proveer también a los clientes del otro lado de la frontera”, dijo el encargado de la empresa Taurus.
Agregó que por la alta demanda hubo faltante de combustibles y que se vieron obligados a mandar traer de otras filiales para no quedar desabastecidos.