A lo largo de su trayecto por la ciudad hasta desembocar en el río Paraguay, el arroyo Paraguarí se encuentra repleto de basura de todo tipo. El olor en ciertos horarios puede resultar insoportable, debido al agua servida que se mezcla con los desechos alimenticios y domésticos.
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Este cauce se ha convertido en un vertedero para el vecindario y los carriteros que recogen electrodomésticos o basuras grandes y los arrojan al arroyo. En Itá Ybaté, entre México y Antequera, un equipo de ABC hoy observó colchones, ropas y hasta restos de algunos objetos electrónicos, además de ramas que impiden que el agua circule correctamente.
Al observar las imágenes satelitales y seguir el cauce del arroyo se puede observar que sus aguas sucias terminan desembocando en el río y las imágenes hablan por sí solas. La contaminación hídrica de la ciudad capital es cada vez peor.