Una de las paradas de buses que se encuentran en lamentable estado es la situada en la avenida Mariscal López, cerca de Calle Última, la cual -según comentan los usuarios del transporte público- fue impactada por un automóvil en un accidente de tránsito.
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A causa de esto, se rompieron el asiento, los vidrios que protegían del viento y parte de la estructura que sostiene el techo, por lo que actualmente no es seguro utilizar esta parada.
“Esta parada está así hace casi un mes. Un accidente de tránsito terminó de destruirla, porque antes de eso ya estaba mal, estaba fea”, señaló una usuaria de transporte público, quien tenía una pierna enyesada y no contaba con un lugar seguro en donde esperar el bus.
Además, la vereda en esa zona también se encuentra en muy mal estado, por lo que también es difícil transitar por la zona y más para personas que tienen alguna dificultad física.
En varias zonas de la capital también hay otras paradas de buses que presentan las mismas falencias: están rotas, sucias y algunas llenas de basura que se acumulan en el sitio con los vientos. Además de las paradas de buses, también las veredas y los propios colectivos no son lo que merecen los usuarios del transporte público.
En abril pasado, el intendente de Asunción, Óscar “Nenecho” Rodríguez (ANR), otorgó la concesión de espacios públicos al Consorcio OH, que explotará publicidad en esos lugares a cambio del pago de un canon ínfimo. La firma construyó 102 refugios para pasajeros gastando unos G. 5.000 millones y espera ganar en contrapartida al menos G. 42.840 millones.