La obra es dirigida por la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), que debe administrar los reservorios y asegurar la provisión del acueducto a las comunidades beneficiarias. El presidente Mario Abdo Benítez y el ministro de Obras, Arnoldo Wiens, estuvieron en el acto de inauguración.
“Ayer se cumplieron 87 años de la firma de paz entre Paraguay y Bolivia (…) El mejor homenaje que podemos hacer a nuestros héroes es desarrollar el territorio chaqueño y construir bases de relacionamiento”, mencionó Mario Abdo. Agregó que el Chaco se proyecta a ser un importante corredor logístico en Latinoamérica.
“Tal vez algunos recuerden 15 años atrás cuando se iniciaron los trabajos y fue el gobierno de España quien nos dio un gran impulso con US$ 60 millones de fondos no reembolsables. Este es un día histórico y las poblaciones indígenas son la prioridad de esta obra”, dijo el ministro Arnoldo Wiens.
Esta nueva extensión costó US$ 10.800.000 y con esto el acueducto suma 522 kilómetros de tubería que beneficiará a más de 7 mil personas de las comunidades de Laguna Negra y Santa Teresita.
En el acto estuvo presente también el ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Rogelio Mayta. “Es una felicidad acompañar este acto (…) Es un gran honor participar de este logro”, mencionó.
El cuello de botella
El presidente Mario Abdo enfatizó que las obras de la fase 1 del acueducto fueron hechas 15 años atrás y que ahora tiene problemas que deben solucionarse. “Es sabido que el cuello de botella son los primeros 100 kilómetros desde la toma de agua en Puerto Casado”, dijo.
De hecho, recientemente el Gobierno admitió que dicha fase 1 de la obra debe ser reconstruida; pese a ello, el Gobierno garantiza que los reservorios -que son más de 6- estarán abastecidos para proveer de agua en especial a las comunidades vulnerables.
En el evento también se donaron dos ambulancias a la XVl Región Sanitaria de Boquerón, a modo de reforzar con dichos elementos el sistema público de salud.