El Tribunal de Sentencia integrado con los jueces María Fernanda García de Zúñiga, Juan Carlos Zárate y Cándida Fleitas, condenó a 20 años de cárcel a Pedro Medina y José Antonio Guillén, al ser hallados culpable de haber abusado sexualmente de una niña indígena de 13 años de edad.
Para el tribunal colegiado quedó probado que los ahora condenados abusaron sexualmente de la menor el 27 de enero de 2020 en el predio de la exCervecería Paraguaya, ubicada sobre la calle Hernandarias, entre Palma y Don Bosco, en el centro de Asunción.
En la audiencia pública asimismo se pudo determinar que la niña fue atada de pies y manos, le dieron alcohol y droga para abusar de la misma.
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La fiscala del caso de abuso sexual en niños, Alejandra Savorgnan, solicitó 20 años de prisión para los acusados, pena que finalmente fue impuesta por los magistrados que integraron el tribunal colegiado al probarse los hechos que presentó el Ministerio Público.
Antecedentes de la violación
Un grupo de jóvenes que pasaba caminando en las inmediaciones de la exfábrica de la Cercevería Paraguaya, escucharon los gritos que provenían del interior de un predio abandonado, en la madrugada del 27 de enero de 2020. Al ingresar al edificio que se encuentra en ruinas, encontraron a la niña indígena que estaba maniatada de pies y manos y sin ropa interior, y con rastros de una posible violación.
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Presurosos los jóvenes acudieron a una parada de taxi que se encontraba cerca de la exfábrica, y pidieron que llame a la Policía, Los agentes del orden se constituyeron en el lugar y constataron el deleznable hecho.
La niña fue llevada un centro asistencial donde estuvo internada por unos días y posteriormente, derivada al Centro de Adicciones, para desintoxicación.
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De acuerdo con los datos proporcionados en la época por la pediatra Carmen Sánchez, la niña tenía una historia de consumo desde los 8 años, con cola de zapatero y a los 10 años de edad, empezó a consumir crack.