El Instituto Nacional de Estadística (INE), con apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), dio a conocer hoy la primera medición de la inseguridad alimentaria en Paraguay. Esta medida, revela el deterioro en la alimentación e incluso hogares que pasaron hambre en el último año.
Según los datos revelados ayer en conferencia de prensa, el 24,63% de los hogares en Paraguay (25 de cada 100 hogares) se vieron afectados por la inseguridad alimentaria moderada. Considerando datos de la Encuesta Permanente de Hogares Continua, la cantidad de hogares en Paraguaya fue de 1.935.412 unidades en 2021, de esta cantidad, unas 476.691 tienen déficit en alimentación. Es decir, que bajaron la calidad o la cantidad de alimentos, ya sea por la falta de dinero, la elevada inflación, y otros factores. Además, el 5,31% (5 de cada 100 hogares) llega a la inseguridad alimentaria grave (102.770 hogares). Es decir, en estas viviendas, alguno de sus integrantes pasó al menos un día sin comer.
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Nueva medida en encuesta
Iván Ojeda, director del INE detalló que esta medida fue obtenida a partir de la aplicación de la Escala de Experiencia de Inseguridad Alimentaria (FIES, por sus siglas en inglés), a un módulo del tercer trimestre de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC) 2021 del INE, y que la misma constituye un hito en materia de seguimiento de los cambios en la inseguridad alimentaria en nuestro país. De la presentación participaron también el Representante de la FAO en Paraguay, Jorge Alberto Meza Robayo, la Directora de Encuestas a Hogares del INE, Norma Medina, y la conexión virtual, desde Roma, del experto internacional de FAO, Carlo Cafiero.
La FIES es una herramienta diseñada por la FAO y utilizada internacionalmente para estimar la prevalencia y gravedad de la inseguridad alimentaria de individuos u hogares, según detallaron.
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Según explicaron, la prevalencia de la inseguridad alimentaria en niveles moderados o graves referencia una falta de acceso continuado a los alimentos, lo cual disminuye la calidad de la dieta, altera los hábitos alimentarios normales y puede tener consecuencias negativas para la nutrición, la salud y el bienestar.
Además, los hogares o personas que afrontan una inseguridad alimentaria grave es probable que se hayan quedado sin alimentos, experimentado hambre y, en las situaciones más extremas, hayan pasado varios días sin comer, lo cual pone su salud y bienestar en grave riesgo, mencionaron los expertos de FAO.
Por zona y departamentos
De acuerdo con los datos, la prevalencia de la inseguridad alimentaria en hogares por área de residencia es más acentuada en zona rural con el 28,52% en inseguridad alimentaria moderada frente a 22,08% que se registro en viviendas de zonas urbanas. En cuanto a los que están riesgo grave, el 6,05% en zona rural y 4,83% en zona urbana.
Los departamentos con más familias con problemas graves de alimentación son Caazapá y Alto Paraná