Los detenidos de ayer son Carlos Mario Velez Jaramillo, colombiano, de 65 años, y Abel Ulises Salas López, paraguayo, de 27 años, quienes fueron capturados en una serie de allanamientos que se hicieron en la zona de Capiatá.
Posteriormente, se entregó Carlos Ariel Escobar Ruiz, paraguayo, de 24 años.
Los procedimientos fueron ejecutados por policías del departamento de Homicidios y del departamento de Investigaciones de Paraguarí.
Los tres hombres supuestamente mataron el sábado a las 23:30 en el cerro Mbatoví de Paraguarí al herrero Darío Miguel Enciso Saavedra, de 32 años, en un ataque en el que también salió herida la mujer de este, Fátima María Lidia Pavón Vall, de 32 años.
Varias versiones
El caso inicialmente fue presentado como un asalto, tal como lo dijo la sobreviviente, quien sin embargo después cambió varias veces su versión ya que la Policía no le creía debido a que el ataque se produjo en un lugar turístico, pero inhóspito.
Finalmente, la mujer reconoció que fueron citados en el lugar por Carlos Ariel Escobar Ruiz, quien a su vez estaba acompañado por Carlos Mario Velez Jaramillo y Abel Ulises Salas López.
Lo que a la Policía no le queda claro es para qué se encontraron los tres hombres y la pareja en ese desolado sitio y en una hora tan inusual.
Fátima explicó al respecto a los agentes que supuestamente debían conversar sobre un negocio que estaban emprendiendo y que consistía en la búsqueda de oro enterrado (plata yvyguy), según informó el director de Policía de Paraguarí, comisario general Rubén Paredes.
El jefe de Homicidios, comisario principal Hugo Grance, señaló por su parte que la mujer también mencionó que iban a hacer un ritual en el cerro para atraer la suerte y conseguir un contrato laboral que la pareja estaba aspirando.
Supuestamente, el que iba a dirigir el ritual era el colombiano. De hecho, un día antes ya prepararon el escenario para el ritual o ya llevaron a cabo la primera parte del acto, ya que cuando los uniformados recorrieron el lugar encontraron por ejemplo restos de velas, pedazos de tela y hasta servilletas que tenían presunta sangre y presunto semen.
Otra versión que recogió la Policía es que el colombiano y los dos paraguayos supuestamente indujeron a Darío Miguel Enciso Saavedra y Fátima María Lidia Pavón Vall a que empeñaran un vehículo con la promesa de que cuando consiguieran el trabajo por el que estaban haciendo el ritual iban a recuperar su dinero.
Los investigadores aguardan que la mujer cuente qué es lo que realmente pasó. Los tres detenidos niegan haber estado en el lugar del crimen.