“Posiblemente para las ausencias se pueden aplicar multas, pero realmente es la presión ciudadana y la exposición mediática la que va a lograr una mayor participación (de los diputados a las sesiones)”, indicó.
El parlamentario defendió la posición política que muchas veces tienen los diputados de retirarse de la sesión en un determinado punto y dejarla sin quorum.
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“Dejar sin quorum una sesión es una herramienta interna, posiblemente no la mejor, pero genera espacios para negociar acuerdos y validar posturas. Una cosa es que los legisladores no lleguen a la sesión y otra muy distinta es que se levanten en determinado momento”, manifestó el legislador.
El miércoles pasado, la convocatoria de la sesión ordinaria de la Cámara Baja marcada para las 08:30, quedó sin quorum. En una segunda convocatoria se volvieron a incluir cerca de 30 puntos y sólo tres pudieron tratarse.
Varios diputados entre ellos colorados y liberales llegaron con más de dos a tres horas de retraso y cuando se predisponían a tratar los puntos, provocaron nuevamente la falta de quorum, simplemente porque debían almorzar.