En el manifiesto, los padres del colegio privado de Lambaré indican que a partir de ahora estarán en vigilia y lamentan el supuesto caso de abuso en un niño de la institución. Instan a que todos los entes del Estado tomen cartas en el asunto, y que la justicia caiga con todo el peso de la ley sobre los responsables.
Repudian todo tipo de violencia y abuso en contra de niños, niñas y adolescentes. Califican al suceso como deleznable y atroz.
También critican el actuar de la directiva, ante un posible hecho punible. Criticaron que hayan respondido con soberbia y poniendo énfasis en la directora Carolina Urbieta, quien sostuvo que la denuncia de la familia era una “nimiedad”.
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Se percataron que la grave situación no fue tratada en tiempo y forma. Condenan que no se procedió conforme al debido proceso, por no entregar inmediatamente, las posibles pruebas a las autoridades que investigan.
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Resaltan que la Dirección del colegio insista con su posición de minimizar y menoscabar el caso, ante las denuncias realizadas en las instancias correspondientes.
Están firmes y atentos con el apoyo de la ciudadanía, así como de instituciones educativas públicas. Todos con el reclamo unánime de Justicia, se comprometen a no soltar la mano de los pequeños y pequeñas.
El objetivo es velar y proteger sus derechos, pues entienden que la víctima pudo ser cualquiera de sus hijos, más aún, ante una sociedad “enferma”. El texto finaliza recalcando que “Todos Somos Responsables” y enfatizan en la postura al que se sumaron muchos de: ¡Con los niños no!.
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