En un recorrido de ABC Color se pudo corroborar que la ciudadanía sigue sufriendo por el pésimo servicio que ofrecen la mayoría de las 42 empresas concesionarias del transporte público de pasajeros, pese al sideral aumento del subsidio desembolsado a las diferentes concesionarias del Estado. Los estudiantes, que ya vuelven a las aulas, también deben esperar durante horas para poder llegar a las instituciones educativas y a sus casas, según se pudo corroborar.
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El viceministro Víctor Sánchez, evita responder las consultas sobre este tema y, además, no sabe ni cuántos pasajeros son beneficiados con la subvención. Esto pese a que ese funcionario desembolsó G. 104.447 millones en concepto de subsidio a los transportistas, que representan un considerable aumento respecto a los G. 59.821 millones que el Estado abonó a los empresarios del sector en el 2020, de acuerdo con los datos preliminares de la institución, monto que incluso puede aumentar más.
Sánchez indicó que son solo 30 a 33 empresas las que cobran subsidio de las 42 que operan en los diferentes itinerarios y manifestó que el resto de la subvención no se paga a las empresas irregulares, pero ¿por qué no cancelan los permisos a las empresas irregulares?.
Se trata de la cifra más alta que pagó la institución en esta subvención, la cual comenzó a implementarse durante el Gobierno de Fernando Lugo, en 2011. Para tener una idea, el monto “récord” se desembolsó en el 2012 (Gobierno de Federico Franco y Lugo), cuando se entregaron G. 101.836 millones, según los registros.
Este incremento de la “ayuda” a los empresarios del transporte público coincide con la implementación de la tarifa técnica del pasaje desde marzo del año pasado, que actualmente se calcula y se paga de forma retroactiva a las diferentes líneas de colectivos.
Antes de este cálculo, el subsidio del pasaje en bus convencional era de G. 55 por boleto, mientras que en los ómnibus con aire era de G. 575. Sin embargo, en enero de este año la tarifa técnica del pasaje ya llegó a G. 5.314 en los buses con aire y G. 3.896 en los convencionales. Con este precio del boleto, el Estado estará subsidiando G. 1.914 y G. 1.596 por pasajero, respectivamente, que le costaría unos G. 1.755 millones al Estado por día, dependiendo de la cantidad de viajes.
Asimismo, se estima que este año aumentará aún más esta subvención estatal a las empresas del transporte, atendiendo a que el precio de los carburantes sigue subiendo y este sobrecosto es absorbido por el Estado, para que el pasaje se mantenga en G. 2.300 (bus convencional) y G. 3.400 en el diferencial.
Para el primer semestre se prevé un presupuesto de G. 110.000 millones, lo que significa que este año también se duplicaría la subvención a los transportistas.