Quién es “Aldito”, el narco paraguayo que cayó en Villa 31 de Argentina

Aldo Rolín Acosta, es conocido como el segundo al mando de una de las estructuras históricas involucradas en el narcotráfico en el asentamiento de Retiro, Buenos Aires. Él ya fue detenido por la Antidrogas de Argentina ayer lunes, al igual que su jefe “El Groso” y la mayor parte de su grupo criminal. Conozcamos la historia del virtual jefe de “Los Sampedranos”,

Aldo Rolín Acosta, jefe virtual de un grupo narcotraficante en ArgentinaInfobae
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El narco paraguayo Aldo Rolín Acosta fue detenido ayer lunes por la tarde por el Departamento de Investigación Antidrogas de la Policía de Buenos Aires. Esta división infiltró la zona que es controlada por los paraguayos en el asentamiento de Retiro para el arresto del que sería una de las cabezas del narcotráfico en la zona.

El medio argentino Infobae redacta que, el cariñosamente conocido como ”Aldito”, no empezó como traficante, al igual que otros presuntos narcos paraguayos en la Villa 31 de Retiro.

Aldo Rolín anteriormente era conocido por su labor en la albañilería. Desde el 2011 hasta el 2015 tuvo varios empleos para ganarse el pan de cada día; sin embargo, luego se rebuscó “en otra cosa”, y definitivamente llegó lejos.

Existen varias historias sobre drogas en Retiro, Argentina, pero el nombre de “Aldo” aparentemente recién resuena. Infobae señala que no aparece en fallos de primera o segunda instancia en el fuero federal, o en condenas del fuero de instrucción por robos y homicidios.

Aldo, jefe virtual de “Los Sampedranos”

Por otro lado, Aldo era el jefe virtual de calle de la facción paraguaya, que controla históricamente la zona. Este grupo criminal es conocido como “Los Sampedranos”, haciendo referencia al segundo departamento de Paraguay.

Este grupo está en el radar de los policías y vecinos desde el 2013 aproximadamente y, según Infobae, saltaron a la fama por vender droga frente a un colegio cristiano de la villa, el Fili Dei, con sus ya míticos jefes, los hermanos Acosta Fouz.

Relatan que comercializaban la droga a través de una red de recaudadores, campanas e inclusive involucran a menores de edad en los lugares públicos como canchitas y centros educativos.

“La organización dispone de cientos de personas para ocupar los diferentes roles, se calcula unas 300, sin embargo las pruebas reunidas permite individualizar a unas 125 en tal actividad, de las cuales 64 fueron debida y fehacientemente identificadas. Por otro lado, del entrecruzamiento de los datos obtenidos por cada brigada se logró acreditar que 77 inmuebles del barrio eran utilizados para el negocio ilícito, con 18 vehículos vinculados también a la actividad”, dice un documento de la causa, según Infobae.

El piki-voley paraguayo y el narcotráfico en Argentina

El alto mando de Los Sampedranos, según datos, solían reunirse a la sombra de la autopista Dr. Arturo Umberto Illia, en un pasillo de la manzana 99, cerca de la cancha de piki-voley. En esa zona, una cámara de la Policía durante el 2018 logró fotografiar a los miembros de este grupo.

Aldo Rolín se sentaba en una silla y junto a él estaba David Felitas González, acusado de ser proveedor junto con Emilio Herrera Domínguez, argentino de 22 años, hoy detenido. Arnaldo Pereira, acusado de ser un campana, se sentaba con su remera roja. Junto a Aldo, vestido de campera negra se encuentra Florentín Montiel, acusado de ser el cuarto capo de la banda.

El ex albañil, como Aldo, Juan Ramón Ortigoza Acosta, conocido como “El Groso”, no se encontraba en el grupo con sus amistades. Este fue preso desde 2019, arrestado también por la Policía de la Ciudad. Se presume que Ortigoza manda desde la cárcel, como lo hicieron otros grandes jefes narcos.

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