La nota dice textualmente: “Un rumano chantajeado por el juez Rubén Benítez y una venezolana para recuperar a su hijo”.
“Soy víctima y acusado injustamente por mi exesposa que vive con el juez corrupto Rubén Benítez de San Juan de Nepomuceno. Un juez de paz a quien he recusado por sus abusos. Un juez cual practica la prostitución encubierto.
Mi exesposa, de nacionalidad venezolana, es culpable de robar una gran suma de dinero a la familia, malos tratos a mi hijo confirmados por varios testigos. Escenificando una prueba de violencia a sugerencia del juez gordo, ella misma admite que lo provocó con el deseo de incriminar. Escenas de violencia que provocó, por sugerencia del juez, cuando ambos íbamos a divorciarnos de mutuo acuerdo (amigable). Lo cual está penado según el código penal.
Parece que la Fiscalía accede a extraer información y publicar en la prensa con el fin de desvirtuar mi imagen, lo cual, según el art. 4, es punible
El asistente fiscal Alexis Franco Sosa se permitió brindarle al juez información del caso y agregó otras mentiras que son contrarias al artículo 4 Ley 1286. En San Juan Nepomuceno todos son un agua y tierra
Pido a la Fiscalía que sea imparcial, lo que no ha demostrado hasta el momento.
Dejen de permitir que el juez corrupto acusado y su padre, quien es un ex político corrupto, orquesten el caso.
Solicito a la Fiscalía que expida orden de prisión preventiva a mi ex esposa por hurto respectivamente de 1.200 dólares, y otra cuantiosa suma de dinero que le robó a mi padre, así como otra acusación confirmada por testigos: malos trato al menor, chantaje y fabricación de prueba falsa, según el artículo de la ley, es un delito, por el cual pretendía incriminarme. Liberar a una prostituta es un peligro social, ella puede cometer otros delitos y se puede comprobar, por ejemplo: sin mi consentimiento hizo una deuda en claro sin pagarla y pidió prestada dinero a muchas otras personas sin avisarme usando mi número.
Utiliza a la inocente Niculaie Iancu, mi niño, como pantalla para salir rápidamente del país y escapar de la prisión. El niño fue criado más por mi madre (Daniela Iancu), provienen de una familia con 12 hijos, con principios cristianos de vida y orígenes sanos.
Tengo una casa, tengo una buena situación social, gracias a Dios puedo criar al niño que fue secuestrado a la fuerza por el corrupto tocineta Rubén Benítez, sin decisión, sin informe, solo para aumentar el harén que él patrocina.
El caso está siendo orquestado por el juez corrupto recusado y su padre, por lo que buscan el apoyo de la Corte Suprema porque el caso se les fue de las manos. A través de las mentiras que se traen a la prensa, me influenció los testigos y la decisión de la Fiscalía. Los testigos reciben llamadas telefónicas para retirar los cargos. Los anteriores están respaldados por pruebas, documentos escritos, con testigos y son reales.
El juez corrupto patrulla una red de prostitución en San Juan de Nepomuceno, bajo el pretexto de la ley, que debe ser destruida.
¡Es un destructor del destino! Mi ex esposa vivió un tiempo en la casa de su padre y ahora en uno de sus locales. Son muchos los que se benefician y son socios de su club. Está claro que mi mujer ha pasado por su cama, ya no es relevante, paga sus favores con intimidad.
Dijo que era el patrón y protector de las mujeres. ¿Qué ley le concede este derecho?
En apoyo de lo anterior, presento documentos con evidencia que respalda mis declaraciones”, concluye la carta.