Cada día se acentúa más la falta de lluvia en varios distritos del departamento de Ñeembucú. Los productores ganaderos del área comentaron que la sequía les ha golpeado con fuerza.
Javier Rolón, representante de los medianos productores de la ganadería, explicó que la naturaleza golpeó con dureza a los ganaderos.
Sostuvo que la situación se agrava por la falta de lluvia y la escasez de pastura.
“Los pequeños productores que están con pequeñas parcelas, ya no cuentan con suficientes alimentos para sus ganados y a parte estamos en la puerta de otro invierno”, refirió Rolón.
“La prolongada sequía trajo consecuencias negativas, no hay materia prima, no hay insumos para los animales, como forrajes, pastura”, agregó.
Dijo que el panorama se ve negro en lo económico, ya que la producción agrícola tuvo grandes pérdidas en el maíz y la soja.
“Al no haber zafra de estos productos, escasea y los precios suben, y es otro golpe para el sector”, señaló.
Rolón dijo esperar que el Gobierno tenga en cuenta la situación que están atravesando los medianos y pequeños ganaderos.
“Ya no tenemos agua en los tajamares, necesitamos que el Gobierno adquiera una máquina perforadora de pozos artesianos para ayudarnos y así salvar a nuestros animales”, mencionó
A la falta de lluvias en la zona se sumaron los incendios de pastizales, que dejaron sin pasto a cientos de miles de cabezas de ganado vacuno.
Rolón dijo que hasta la planta de caña dulce, otra materia prima que se utiliza para dar de comer en especial a las vacas lecheras, no creció por falta de lluvia.
Resaltó que ya se siente la escasez de leche de vaca y de queso por falta de alimento para las vacas. Dijo que con mucha esperanza están esperando lluvias para que mejore la situación en el departamento.