Ña Juana deberá seguir el proceso administrativo para lograr su cirugía

CAPIATÁ. A diferencia de otros enfermos que aparentemente son privilegiados por las autoridades sanitarias, Juana Mercado, quien tiene un tumor en el rostro, vive a la sombra de la burocracia desde hace dos años. La respuesta que hoy recibió del Instituto Nacional del Cáncer (INCAN) es que deberá consultar en el Hospital Nacional de Itauguá para que un equipo de neurocirujanos la evalúen para definir si podrá ser operada. En contrapartida, el pastor Emilio Abreu tuvo en una semana la autorización Ministerio de Salud para someterse a una cirugía en el Instituto de Previsión Social (IPS), sin ser asegurado.

Para doña Juana no hay privilegios. Deberá seguir el proceso burocrático para acceder a una cirugía en el IPS.
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Doña Juana viene peregrinando desde hace dos años para encontrar la cura a su enfermedad. Hoy recibió una respuesta luego de que su caso se haga conocido a través de los medios de comunicación.

Luego de varias conversaciones entre el ministro de Salud, Julio Borda, y el director del Incan, Julio Rolón, se decidió enviarla al Hospital Nacional de Itauguá para que sea evaluada por especialistas que determinarán si puede ser intervenida.

Juana, de 33 años, contó la odisea que le tocó transitar debido a su condición médica. “En el 2020, yo dejé de respirar en un lado de la nariz, pensé que era sinusitis. Me hice la tomografía y vi que el tumor estaba creciendo. En ese entonces, era un tamaño bastante grande. Yo me hice todos mis tratamientos, y estudios en el Incan, y me dijeron que no me podían operar. Me fui en otros lugares, toqué muchas puertas. Recorrí todos los hospitales nacionales de Paraguay, pero ninguno sabía cómo ayudarme”, rememoró.

También contó que en el Hospital de Trauma le indicaron sobre el convenio con el Instituto de Previsión Social (IPS) y el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPYBS), sin embargo, se encontró con una dificultad enorme: la extrema burocracia y también la falta de interés en los casos que no van acompañados de padrinos o recomendados.

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“En IPS está la traba”

“Llevo dos años tratando de que se me opere. Hasta hoy día yo no consigo que se me haga esa cirugía. Yo llevé todos mis documentos, presenté quiénes son mis médicos de cabecera, conseguí la firma del ministro de Salud, pero en IPS está la traba. Yo volví a hacerme todos los estudios esta última vez, y presenté a los médicos del IPS para que la Junta Médica pueda emitir un informe, pero resulta que todos están de vacaciones”, lamentó.

Desde enero del 2021, inició con los trámites en IPS para acceder a la cirugía a través del convenio pero hasta la fecha no ha conseguido avances, solo la derivación al Hospital Nacional de Itauguá a pedido del ministro de Salud, Julio Borda.

Ña Juana ya tiene la vista comprometida

Doña Juana refiere que tanta espera ya ha repercutido en su salud. Tanto es el avance del tumor que tiene en su rostro, que no puede ingerir alimentos sólidos, en una de sus narices no puede oler, ni respirar, y prácticamente debe mantener la boca abierta para poder respirar en todo momento.

El lado derecho de su ojo también está comprometido, e incluso ya empieza a ver borroso.

El caso de la mujer en comparación al del pastor Emilio Abreu, quien consiguió autorización para operarse en el IPS sin ser asegurado, en tan solo ocho días, generó crispación en la ciudadanía que reclama que algunos son tratados con privilegios, mientras que otros, quienes no tienen influencias o contactos políticos, sufren la desidia del sistema de salud pública.

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