El informe emitido por el Centro Multidisciplinario de Investigaciones Tecnológicas (CEMIT) de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), indica que en los resultados de la cuarta semana se observó una llamativa suba de los niveles de cianobacterias (algas tóxicas) en el lago.
El lago al no ser un ecosistema estable o de agua estancada, en épocas de sequía, periodo en el que no hay una importante cantidad de lluvia en la cuenca que abarca 21 municipios, el agua que ingresa al lago Ypacaraí a través de los arroyos que pasan por los humedales y estos funcionan como una planta de tratamiento natural.
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Estos humedales tienen el poder de regular y depurar las aguas, consumiendo el fósforo (P), nitrógeno (N) y las coliformes fecales. Pero en época de grandes lluvias se forman caudales que arrastran todo lo acumulado en la cuenca, haciendo que los humedales no puedan cumplir con su funcionamiento y deja pasar todos los elementos contaminantes sin que hayan sido procesados. Y de ese modo, las cianobacterias aprovechan las cargas orgánicas y los nutrientes principalmente fósforo (P) y nitrógeno (N), para reproducirse de manera abundante.
Los contenidos de nutrientes del agua, la alta temperatura, la transparencia del líquido, como así también la velocidad y dirección del viento, son variables que establecen las condiciones para se reproduzcan o no las cianobacterias.
“Las variaciones ocurren por las lluvias, primero ayudan a reducir los niveles y luego acarrean residuos provenientes de los hogares, aumentan los niveles de coliformes y por ende, las cianobacterias pueden duplicarse y esparcirse”, refirió Gilberto Benítez, responsable de gestión de proyectos ambientales.
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Benítez alertó que “el riesgo está al entrar en contacto con el agua afectada por cianobacterias, ya que uno se puede exponer al contacto con diversas toxinas que pueden causar en el sistema nervioso, el hígado y la piel”.
Por lo tanto, el CEMIT recomienda evitar el contacto primario, es decir, aquellas actividades que impliquen nadar o sumergirse en las aguas del lago Ypacaraí. Por otra parte, están permitidos el contacto secundario, como andar en canoa, lancha, etc.