La Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP), gremio que representa a los anunciantes nacionales y multinacionales ante la sociedad y cuya presidencia actualmente ejerce Patricia Toyotoshi, evaluó el año 2021 como “bastante complejo”, en el contexto de segundo año de la pandemia y que esta situación sanitaria impacta en todos los sectores de la economía. “Los empresarios nos vimos obligados a reinventarnos y a rediseñar nuestras actividades comerciales para enfrentar el momento, sostener los empleos y mantener a flote nuestras empresas”, recordó.
En ese sentido, mencionó que de parte de las autoridades del Gobierno hay mucho por hacer. ”Se necesitan reformas estructurales para mejorar la prestación de servicios públicos y la responsabilidad de las instituciones públicas para hacer que el crecimiento sea más estable, sostenible e inclusivo”, dijo.
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Cabe recordar que para hacer frente a la crisis derivada de la pandemia y cumplir con las obligaciones del Estado, el Gobierno contrajo deudas millonarias y un porcentaje importante de las mismas, fue destinado a pagos de salarios. Esta situación fue motivo de críticas de economistas y sobre todo empresarios, quienes deben producir para pagar impuestos, al igual que los contribuyentes en general, de modo a que se puedan saldar los créditos adquiridos.
“Desde la CAP venimos impulsando acciones sobre temas que consideramos relevantes para nuestro país, como mejorar sustancialmente la calidad del gasto público, que permita generar nuevos espacios para oxigenar las finanzas públicas, así como empujar proyectos que contribuyan al desarrollo y crecimiento socioeconómico del país”, manifestó.
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Fortalezas y debilidades
Toyotoshi describió lo que consideró como aspectos positivos en las características de la economía paraguaya. Mencionó la estabilidad y gestión macroeconómica estable y prudente, la creciente diversificación en el PIB, lo que reduce la dependencia agropecuaria y el acceso a nuevos mercados, además del bajo precio de la energía y la política monetaria con base en metas de inflación, además de que la población es mayoritariamente joven, con alta capacidad de resiliencia.
Como aspecto que se debería mejorar, observó la optimización de los gastos y la formalización de la economía. En ese sentido, indicó que desde el gremio se tiene activa participación “exponiendo los daños que la economía informal ocasiona a la imagen del país y al escenario de negocios”, dijo.
Añadió que la informalidad afecta la rentabilidad de los negocios formales, reduciendo la inversión, la generación de empleos de calidad y la recaudación de impuestos. De hecho, el contrabando registrado en todo este 2021 es una de las preocupaciones de los empresarios, que se unieron y sentaron postura unánime para exigir resultados al Gobierno.
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De hecho, pidió a la gente que realiza sus compras de fin de año, que sean conscientes y opten por el consumo de marcas formales. Argumentó que las empresas legales sostienen todo el sistema económico, puesto que que pagan impuestos, generan empleos, aportan a Instituto de Previsión Social (IPS) e invierten en el desarrollo del país.
Expectativas para 2022
Toyotoshi aseguró que se aguarda el inicio del 2022 con mucho optimismo y grandes desafíos, aunque, mantuvo muy presente que siguen vigentes la posibilidades de un contagio masivo del coronavirus. “Habrá que seguir lidiando con la pandemia, por eso es importante que el proceso de vacunación siga avanzando en forma efectiva y para toda la población”, expresó.
Destacó la importancia de la inmunización anti covid-19 de la población para que todo el país, se beneficien con la posibilidad de poder proyectar mejores perspectivas y una reactivación en todos los niveles de la economía, micro y macro.