Muy avanzado está el estudio de un nuevo anteproyecto para crear el Instituto Paraguayo de la Carne, ya pasó por muchos estamentos que lo estudiaron en forma suficiente y que luego deberá ser consensuado con el otro componente de la cadena de la carne, el sector industrial, según anunció anoche el presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Dr. Pedro Gali, en el marco de la inauguración de la nueva sede social de la Regional Cordillera de dicha organización.
“Saldrá algo bueno, vamos a tener un instituto que realmente cumpla con el papel que se necesita, que es el de trazar las políticas nacionales sobre la carne y el mercado de la carne”, manifestó.
Durante el acto inaugural también habló el presidente de la Regional Cordillera de la ARP, Dr. José Pappalardo. El mismo también se refirió a la necesidad de crear el instituto de la carne y al mismo tiempo opinó que el Gobierno paraguayo debería buscar el camino para acceder al mercado de China para la exportación de carne, considerando que se trata de un mercado de 1.400 millones de habitantes.
Manifestó que se deberían rever las políticas del Gobierno de reparto de tierra para la lucha contra la pobreza, por demostrarse que hasta ahora es un fracaso por estar desvinculada de la capacitación y del conocimiento para hacerla producir, por parte de los beneficiados.
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Otro tema abordado por Pappalardo fue el de la sanidad animal; dijo que la alianza público-privada para el sistema de vacunación contra la fiebre aftosa es un éxito; por esa razón se debería mantener la inmunización hasta que el riesgo del rebrote de esta enfermedad sea el mínimo posible.
“Estamos en un programa de colgar las jeringas en el programa de lucha contra la fiebre aftosa, porque hay algunos Estados del Brasil que están haciendo, pero eso sería muy peligroso para nuestro país”, alertó.
En otro orden, respecto al edificio que fue inaugurado, señaló que requirió una inversión de más de G. 1.800 millones, fondos que fueron obtenidos mediante gestión y trabajo de la Regional Cordillera, tales como ferias y otras actividades para lograr captación de recursos.
La obra se compone de un edificio de tres niveles, de 1.100 metros cuadrados construidos.
La bendición del nuevo edificio fue hecha por el párroco de San Blas, padre Zenón Berikani.
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