Fue víctima Aida Adriana Lezcano González de 33 años y el autor del hecho, quien posteriormente se quitó la vida, fue Rafael Olmedo Olmedo, de 38 años, según confirmó el subjefe de la Comisaría 43° de Itá, subcomisario Ángel Sosa.
Según el informe policial un vecino de la zona dio aviso a la Comisaría local y efectivos de esta se constituyeron en la vivienda donde constataron el hecho. Tomó intervención la fiscala Fátima Girala y los agentes de Criminalística se encuentran en el sitio levantando evidencias.
Los reportes de los intervinientes indican que no se sabe a ciencia cierta cuándo ocurrió el hecho por lo que a través de las evidencias recabadas buscarán determinar este y otros datos.
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Sin antecedentes de violencia
Al respecto, el comisario Felipe González comentó a InterCable Canal 10 de Itá que según datos proporcionados por los familiares de las víctimas, ambos llevaban juntos al menos 15 años.
En cuanto a antecedentes, no constan denuncias formales por violencia contra el hombre. Según el hermano de la mujer, la pareja se llevaba bien pero desde hace un tiempo estaban por separarse.
En comunicación con ABC Cardinal, la fiscala Fátima Girala, dijo sobre el posible caso de feminicidio en Hugua Ñaro, que se presentó tras la llamada del personal policial de la Comisaría 43º de Itá, y que acudió junto a personal de Criminalística, así como en compañía del médico forense, y al ingresar vieron el cuerpo del hombre colgado del techo de la sala, con una piola.
En tanto, en la habitación matrimonial hallaron el cuerpo de la mujer, tendido en el suelo al lado de la cama.
En la fallecida se encontraron algunos rastros de violencia como golpes de puño en la boca.
Asfixia por estrangulamiento
La causa de muerte, según describió la investigadora, habría sido asfixia por estrangulamiento, y luego el autor del presunto feminicidio se habría suicidado colgándose.
Para la fiscal prácticamente no hay dudas de que se trata de un feminicidio, pues la casa estaba llaveada por dentro, no estaba forzada la puerta, y se encontraron manchas de sangre en la almohada y el ropero.
Por lo que la agente del Ministerio Público pudo averiguar hasta el momento, se trata de una pareja de 33 y 38 años sin hijos, que vivían solos. La mujer trabajaba en Asunción como empleada y volvió el feriado a su hogar.
Según familiares, ellos estaban atravesando una crisis y una posible separación. Al momento de su hallazgo, los cuerpos llevaban 10 a 12 horas de fallecidos.