En el lapso comprendido entre enero y noviembre de 2020, la “Obra del Siglo XX” producía 70.323 GWh (1 GWh = 1000 MWh), en tanto que en similar período, pero de este año, caía su producción a 60.994 GWh, o sea 9.329 GWh menos. En otras palabras, la cantidad de GWh que la central binacional dejó de producir en los once primeros meses de este año hubiera sido suficiente para cubrir la mitad del consumo eléctrico del mercado paraguayo.
En lo concerniente a la demanda del 2021 del mercado eléctrico paraguayo, según las cifras que publicaron las oficinas locales de la binacional, hubo una reducción de 508 GWh con relación a los apuntes correspondientes al lapso enero/noviembre de 2020.
En cuanto al “precio” de la energía paraguaya en Itaipú (Compensación por Cesión de Energía), las mismas fuentes, en su rendición mensual de cuentas, señalan que entre enero y noviembre de 2020, el Estado paraguayo recibió a través de la entidad binacional US$ 220.910.900; pago que este año se redujo a US$ 183.282.400, 17,03% menos que 2020.
Sequía, pandemia, recesión técnica ...
Sobre las causas de la caída de la producción de la central Itaipú, oficialmente inclusive, sus voceros de turno señalan sin titubeos a la “histórica sequía”, que luego de casi cien años vuelve castigar a la región.
Sin embargo, no es la única. La pandemia que desató y propagó el covid-19, también afectó la demanda de energía eléctrica, principalmente la demanda industrial de energía eléctrica. La prensa brasileña, con eco en la regional inclusive, publicaba la última semana que “Brasil sufre una caída del 0,1% del PIB y entra en recesión técnica (el país.com). Este medio añadía en una reciente publicación que “el ajuste en los datos de abril a junio contribuye al resultado de dos trimestres consecutivos de desempeño negativo con el fin de ciclo de la materias primas”.
“En el sector de electricidad, gas y agua, sin embargo, retrocedió un 4,6%, con el incremento de las tarifas eléctricas, debido a la escasez de agua. El csto de la energía también incidió en el desempeño de las industrias manufactureas, que cayeron un 0,7%, afectadas por los descenso en la fabricación de productos alimenticios, muebles, bebidas, material eléctrico y equipos informáticos”, agrega.
ANDE, 3,5% menos
En el ámbito local, los registros de Itaipú indican que la demanda de la producción de la central paraguayo/brasileña mermó un 3,51%, atribuible igualmente a la sequía y al aún, por extraño que parezca, escaso aprovechamiento de la energía hidroeléctrica (19% contra el 81% de biomasa y derivados del petróleo en el esquema de uso final de energéticos),
¿Por qué afecta la sequía a la demanda local de la energía de Itaipú? Básicamente debido a que la tarifa promedio de la binacional se le encareció, hecho que a su vez explica con la fuga transitoria de la energía barata en Itaipú, técnicamente conocida como adicional o superior a la energía garantizada.
Este hecho también explica, por otra parte, el motivo del mayor aprovechamiento de la ANDE de la energía de Yacyretá, aunque la curva correspondiente siga exhibiendo una exasperante volatidad.