Fiscal acusa y pide juicio oral para supuesto narco Faustino Aguayo

El fiscal Deny Yoon Pak acusó hoy y solicitó al Juzgado Penal de Garantías que eleve a juicio la causa abierta contra Faustino Ramón Aguayo Cabañas, supuesto líder de una red de narcotraficantes que entre 2018 y 2019 movió grandes cantidades de cocaína, dentro y fuera de Paraguay. También es sospechoso de ordenar el asesinato, desde un pabellón con lujos en la cárcel de Pedro Juan, de Osmar Vicente Álvarez Grance (29), alias Bebeto, y su novia Haylee Carolina Acevedo Yunis (21), hija del gobernador de Amambay, Ronald Enrique Acevedo Quevedo.

Faustino Ramón Aguayo, sentado junto a una mujer, cuando la comitiva del Ministerio Público allanó el pabellón VIP de la cárcel de Pedro Juan Caballaro, donde guardaba reclusión.
audima

Faustino Ramón Aguayo Cabañas, de 44 años, fue acusado por los hechos punibles de tráfico de drogas, asociación criminal y soborno agravado por corromper a policías, por el agente fiscal Deny Yoon Pak, de la Unidad Especialidad en Lucha contra el Narcotráfico. El mismo también solicitó que el supuesto líder narco sea sometido a un juzgamiento por parte de un Tribunal de Sentencia en audiencia oral y pública.

Faustino Ramón Aguayo Cabañas

Se presentó en silencio

Aguayo se había presentado el 27 de mayo último ante el juez penal de garantías Mirko Oscar Valinotti Galeano, para su audiencia de medidas cautelares. El magistrado luego resolvió remitirlo a la Penitenciaría Regional de Pedro Juan Caballero para que cumpla su prisión preventiva. Esto ocurrió ante el pedido del propio Aguayo, quien alegó problemas de salud y que su médico de cabecera estaba en ese distrito de Amambay.

Faustino Ramón Aguayo Cabañas en el Palacio de Justicia de Asunción, cuando se presentó en mayo pasado.

Valinotti no notificó a la fiscalía sobre la audiencia y tampoco consultó al fiscal Pak si mantenía el pedido de prisión preventiva que el 28 de agosto de 2019 formuló la también la fiscala antidrogas Fabiola Molas.

Por las actuaciones del juez en este caso, el titular de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), César Manuel Diesel Junghanns, había ordenado una auditoría al expediente de Faustino Ramón Aguayo Cabañas.

Señor de pabellón VIP

Hasta octubre el procesado se encontraba privado de su libertad en la Penitenciaría Regional de Pedro Juan Caballero, pero luego fue trasladado hasta la Agrupación Especializada de la Policía Nacional, en Asunción, después de que una comitiva fiscal encabezada por los agentes Marcelo Pecci y Alicia Sapriza haya descubierto que el mismo no solo estaba en una “celda VIP”, sino que en un todo un pabellón “VIP” desde donde seguía dando instrucciones para miembros de su banda que están en libertad.

El Ministerio Público lo señaló a él como el autor moral del cuádruple homicidio ocurrido el 7 de octubre último en Pedro Juan Caballero. En un sanguinario ataque murieron el supuesto narco local Osmar Vicente Álvarez Grance (29), alias Bebeto, y su novia Haylee Carolina Acevedo Yunis (21), hija del gobernador de Amambay, Ronald Enrique Acevedo Quevedo. También perdieron la vida las brasileñas Kaline Reinoso de Oliveira (22) y Rhannye Jamilly Borges de Oliveira (19), quienes estudiaban Medicina con Haylee en la Universidad Central del Paraguay (UCP).

Se hizo conocido

Los datos refieren que Jorge Teófilo Samudio González, alias Samura, y Faustino Ramón Aguayo Cabañas, operaban a la par en el campo del tráfico de drogas, dentro del departamento de Concepción. Sin embargo, las movidas de este último se vieron opacadas por la organización de Samura, quien fue capturado en 2018 en Bella Vista Norte, departamento de Amambay.

Inmediatamente después de la detención de Samura, la actividad de Aguayo se incrementó e ingresó al radar de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) que, si bien ya tenía registrado desde hace tiempo a un tal Aguayo como narco activo de la zona de Concepción, con ello su identidad fue plenamente conocida y se iniciaron las investigaciones que incluyeron escuchas telefónicas.

Tal es así que entre mayo de 2018 y agosto de 2019, operó la red criminal liderada por Faustino Aguayo y Gustavo Fleitas Benítez, e integrada por Gerardo Barrios, Eugenio Ramón Osorio Villalba, Mauricio Flores Esquivel, Antolín Villalba Alves, Crescencio Aldana Martínez, Derlis Daniel Cabrera Cabañas, Marcos Flores Esquivel y un colaborador externo, Basilicio Cabrera Vera, quien informaba al grupo, mediante su hijo Derlis Cabrera.

En ese tiempo los integrantes del grupo criminal, a través de la distribución de funciones y roles, realizaron las actividades ilícitas de tráfico de drogas desde el territorio nacional.

Aguayo era quien daba todas las indicaciones a los demás integrantes sobre cuándo, cómo y dónde movilizarse para trasladar las cargas de drogas dentro del territorio nacional, para su posterior envío al extranjero. Además, recibía los reportes cuando su mercancía estaba asegurada bajo dominio de su personal de confianza, Gustavo Fleitas.

A esto se suma que recibía la información, sea de su núcleo familiar o de policías que le brindaban servicios de cobertura, según los datos sensibles que obtenían en razón de los cargos que ocupaban, en especial acerca de la presencia de órganos de seguridad en la zona en que operaba el grupo de Aguayo.

Policías eran informantes

El acopio de las drogas era realizado con la cobertura de policías identificados como el subcomisario Pedro Molinas Noguera, jefe del departamento de Crimen Organizado asignado a la oficina regional de Amambay; el suboficial mayor Mario Figueroa Velázquez, del departamento Antinarcóticos de la Policía; el subcomisario Rubén Darío Duarte Jacquet, jefe de la comisaría 15, de Sargento José Félix López y luego jefe de la comisaría 16 de Concepción; el subcomisario Sebastián Ramón Silva, jefe y después subjefe, de la comisaría 15; el suboficial superior Venancio Bolaños, del Puesto Policial N° 17, de Amambay; y el suboficial inspector Carlos Ever Navarro Morales, de la comisaría 15 de Concepción; quienes desde sus puestos colaboraban con el grupo narco.

Esos policías manejaban informaciones tales como la llegada a la zona de operaciones del grupo de Aguayo, de comitivas del Ministerio Público y de la Senad o del departamento Antinarcóticos de la Policía de Asunción, para ejecutar procedimientos; la presencia de policías del Departamento de Criminalística, también del Departamento contra el Abigeato, de la Policía.

A cambio de su colaboración, Faustino Aguayo brindaba a los policías beneficios generalmente de índole económico, que les eran entregados en efectivo o mediante giros por billeteras electrónicas o sistema de cambios de dinero, para los cuales pactaban encuentros en puntos estratégicos.

El fiscal Deny Yoon Pak acusó en diciembre de 2020 a los uniformados por asociación criminal, por las conductas de haber prestado servicios a una organización criminal, y por cohecho pasivo agravado, por haber recibido beneficios a cambio de sus colaboraciones, lesionando sus deberes de agentes de la Policía.

La audiencia preliminar para los mismos estaba prevista para este 25 de noviembre último, sin embargo fue suspendida por pedido de los abogados que ejercen la defensa de los agentes policiales.

Tres cargas perdidas

La organización de Faustino Aguayo acopió 381 kilogramos de cocaína en la localidad de Sargento José Félix López, antes conocida como Puentesiño, departamento de Concepción, que eran transportados por los traficantes por vía terrestre y al ser interceptada la carga por agentes de la Senad, los miembros de la banda huyeron y dejaron su mercancía ilícita. Fue el 24 de enero de 2019.

El 6 de febrero de 2019, en la colonia Cerro Memby de Concepción, fueron hallados 2.199 kilos de cocaína vinculados con el grupo de Aguayo, ocasión en que fueron detenidos Pánfilo Barrios, Ramón Ibáñez López y Sandra Zunilda Coronel Diana, quienes serán sometidos a juicio oral y público.

El 26 de agosto de 2019, fueron hallados en Arroyito 388 kilos de cocaína. Fueron detenidos Marcos Flores Esquivel y Basilicio Cabrera.

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