El cerro Acahay es un patrimonio natural, donde entre sus cristalinas aguas que corren entre las rocas se pueden apreciar el oropel, la envidiable vegetación que caracteriza al lugar y los que gustan hacer senderismo lo podrán realizar, como también se va a indagar sobre la posibilidad de realizar en el lugar deporte extremo como tirolesa y rapel, también se podrá instalar el camping, explicó el jefe comunal Lezcano.
La idea es explotar el lugar como sitio turístico. Para el efecto, se tiene proyectado trabajar con jóvenes líderes y con los lugareños en la formación de guía turística e incentivar a las familias que viven en las cercanías del cerro, para que habiliten sus viviendas como posadas turísticas y dar vida a aquellas que ya se instalaron en el casco urbano.
Los recursos naturales del cerro Acahay forman parte de un gran valor y riqueza patrimonial que posee este distrito, que deben promocionarse, con el objetivo de mejorar el desarrollo socioeconómico de las poblaciones, explicó el jefe comunal.
Lea más: Acá hay de todo
El cerro está situado a 110 kilómetros de Asunción, y mide 560 metros de alto. Se llega desde el ramal que une Carapeguá-Acahay, al llegar a la compañía Yeguarizó se entra a un camino terraplenado que conduce hasta la compañía Cerro Corá y que llega hasta el pie de la serranía.
En el lugar se destaca, igualmente, una diversidad de rocas, fauna y flora autóctonas, además de las diversas especies de mariposas convierten el lugar en sitio privilegiado para realizar estudios científicos y ejecutar programas educativos y ese es uno de los proyectos que se están encaminando con la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur), explicó el intendente Lezcano.
Lea más: Fenómeno de Paraguarí fue similar al sismo que agrietó el cerro Acahay
El cerro Acahay, que abarca unas 2.500 hectáreas, fue declarado área silvestre protegida, por Decreto N° 13.682 del 29 de mayo de 1992. En las cercanías del cerro del barrio Virgen de Fátima viven unas 50 familias, que desde 1977 se instalaron ahí y con ellas se va a comenzar a trabajar para brindarles alternativa de ingresos, creando las posadas turísticas, trabajar en la gastronomía y vendiendo las hierbas medicinales, esto atendiendo que la mayoría de los pobladores se dedican a dicho rubro.