LUQUE (Gladys Villalba, corresponsal). Hace nueve años la Municipalidad de esta ciudad, durante la administración del entonces intendente César Meza Bría (PLRA), cedió en usufructo por veinte años a AsoraPy un inmueble de cinco hectáreas en la compañía Tarumandy. La Finalidad es la creación de un parque ecológico para crianza en libertad de aves silvestres amenazadas.
La Asociación cuida guacamayos rojos, azules y amarillos con azul. Además, loros, cotorras, cacatúas, patos silvestres, tucanes, pájaro campana y otros.
A pesar de la importante función de la organización, el proyecto no prosperó por falta de interés y apoyo de la misma Municipalidad de Luque, ni de la Gobernación de Central ni de otras instituciones públicas y privadas, dijo Gustavo Espínola, presidente de AsoraPy.
“No salió aún el plan, pero eso no nos va a detener. Nosotros seguimos trabajando de acuerdo a nuestras posibilidades y estamos enfocados en el plan de vuelo libre de los guacamayos. Actualmente 40 guacamayos vuelan libres en el gran Asunción y tenemos doce nidos naturales con huevos y pichones que estamos monitoreando”, resaltó.
El terreno de cinco hectáreas cedido a AsoraPy en el 2012 se encuentra invadido desde el 2019 por supuestos sintechos. Esto ocurrió durante la gestión del intendente, ahora reelecto, Carlos Echeverría (ANR), y la Municipalidad no accionó para recuperar la finca. Este año el jefe comunal armó un plan para recobrar el inmueble pero para venderla a un ciudadano alemán para la ejecución de un plan privado, pero fue rechazado por la Junta Municipal.
Gustavo Espínola indicó que el proyecto de creación del parque ecológico no solo significa la crianza de aves, sino que contempla el desarrollo de talleres educativos para niños, jóvenes y adultos, pasantías para estudiantes de carreras relacionadas con la naturaleza o la ornitología. También impulsar el turismo en la zona.
El plan se podría concretar con el apoyo de la Municipalidad, la Gobernación de Central, instituciones educativas, ministerios y empresas privadas, dijo Espínola.
“Incluso existe la posibilidad de que instituciones internacionales nos ayuden. Pero seguimos trabajando en otras opciones”, señaló.