El actual intendente interino de Asunción, César Ojeda (ANR, cartista), hizo pública el 5 de octubre último la rendición parcial sobre el uso de G. 16.000 millones del fondo de emergencia en la lucha contra el covid. El dinero fue utilizado en 2020 durante la gestión del entonces jefe comunal Óscar “Nenecho” Rodríguez (ANR, cartista).
A partir de la publicación de los documentos saltaron numerosas inconsistencias, como la presunta sobrefacturación de los productos adquiridos. Este es el caso de los detergentes de origen francés ALKADDS, que según la empresa representante en nuestro país vende apenas a G. 250.000, pero la comuna compró a G. 393.800; toallitas desinfectantes SEPTALKAN adquirió por G. 259.600 y el detergente en pulverizador SURFALKAN SH por G. 221.650.
También hubo inconsistencias en la adquisición de los kits de alimentos, ya que cada combo sufrió un incremento de casi G. 100.000 en el transcurso del año y en plena pandemia. De G. 349.000 pasó a G. 448.200, según los documentos.
Otro punto llamativo fue que las compras por parte de Nenecho fueron de empresas de rubros completamente distintos e incluso de firmas sancionadas por la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP).
Tal es el caso de Cova, de Juan Rodríguez, que según los registros de la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET) se dedica a la venta al por mayor de materiales de construcción. Sin embargo, vendió detergentes y kits de alimentos a la municipalidad asuncena.
Igualmente, figura Bastian Comercial, de María Victoria Cano Torres. La joven de 23 años supuestamente vendió los detergentes franceses y otros productos importados desde un pequeño local ubicado dentro del mercado municipal Nº 5.
Llamativamente, pese a todas estas denuncias, el Ministerio Público a cargo de Sandra Quiñónez sigue sin asignar a un fiscal para investigar los graves hallazgos. ABC intentó ayer conversar ayer con “Nenecho”, pero desvió nuestra llamada. Estamos abiertos en caso de que desee dar su versión.
Otro caso de “superproveedora”
María Victoria Cano Torres (23), propietaria de Bastian Comercial, que proveyó a la comuna asuncena los detergentes franceses es otra superproveedora del Estado. Y es que, según el portal de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), aparece como vendedora de útiles de oficina, resmas de papel, insumos de limpieza, cartón, hilos y telas.
Cano Torres consiguió su primer contrato en el año 2019 cuando tenía apenas 21 años. Fue con la Dirección de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud Pública.
A partir de ahí consiguió otros 24 acuerdos, curiosamente, todos con la cartera sanitaria. En total logró acumular, en un periodo de tres años, G. 337.931.165 en contratos, según los registros. Lo curioso es que toda esta provisión realizó desde su pequeño local.