El mensaje que acompaña el pedido de adenda para el proyecto de Presupuesto General de la Nación (PGN) 2022, firmado por el ministro de Hacienda, Óscar Llamosas, explica que se contempla una reprogramación dentro de la entidad Petróleos Paraguayos (Petropar) por un monto de más de G. 244.980 millones (US$ 35,1 millones al cambio presupuestado).
Los gastos serán financiados con los recursos generados por la entidad y que, inicialmente, estaban asignados para la compra “energía y combustibles”, así como también para el pago de “deudas pendientes de pago de gastos de capital de ejercicios anteriores”.
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Se recorta G. 51.615 millones previstos para combustibles y G. 193.365 millones para el pago de deudas, que se solicita sean destinados a financiar consultorías, asesorías e investigación; servicios técnicos y profesionales varios; construcción de obras de infraestructuras; maquinarias y equipos industriales, equipos de computación.
En la reprogramación se asigna G. 6.889 millones (US$ 985.268) a la gerencia de la planta de Villa Elisa y G. 238.091 millones (US$ 34,1 millones) para la producción de alcohol en la planta de Troche.
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Estos datos no fueron mencionados por Hacienda en el informe que dio a conocer el último martes cuando presentó la adenda ante la Comisión Bicameral de Presupuesto del Congreso, ni tampoco ayer en la conferencia de prensa virtual realizada, pero se supo luego de que legisladores dieran detalles del contenido del documento.
Audiencia ante la Bicameral
El presidente de Petropar, Denis Lichi, había anunciado la inversión en la planta de Troche ante la Comisión Bicameral de Presupuesto en ocasión de exponer el plan de gasto de la entidad para 2022.
Según dijo el plan incluye la instalación y puesta en marcha de una nueva línea de molienda de caña de azúcar para duplicar la producción de alcohol, lo que generó la crítica de algunos legisladores.
La diputada Celeste Amarilla (PLRA) le señaló a Lichi que la ampliación era solo para subsidiar a unos cuantos productores a costa de toda la ciudadanía y que esto sonaba a campaña electoral, porque el propio presidente de la República, Mario Abdo Benítez, había reconocido que la fábrica registra pérdidas.
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El gobierno ya inyectó US$ 8 millones en la “modernización” de la planta de Troche, con la que pretendían procesar 2.800 toneladas de caña por día, lo que nunca se logró.
En el mes de setiembre Petropar lanzó la licitación para la puesta en marcha de la nueva molienda, que evidentemente no estaba previsto inicialmente en el PGN 2022, pero que con la reprogramación se asegura su financiamiento. La apertura de los sobres está prevista para el próximo jueves 21 del presente mes.