En mayo de 2017, la Municipalidad de Luque encabezada por el cartista Carlos Echeverría, protegido político del clan González Daher y aspirante al rekutú, pisoteó la Constitución Nacional y aprobó la tercerización del cobro del impuesto inmobiliario.
El servicio fue entregado a un consorcio por las empresas Relevamientos Catastrales SA (Relcat SA) y Relcat Paraguay SA, cuyos representantes son Diego Armando Cardona Herreros y Miguel Niella.
La excusa era que con este proceso se conseguiría aumentar la recaudación por los impuestos inmobiliarios. El proceso terminó con un cese del contrato, un pago de una millonaria indemnización a la empresa y con la recaudación incrementada, pero a costa de los “comunes” de Luque.
Uno de los impulsores del proceso fue el condenado concejal Óscar Rubén González Chaves, hijo del exsenador cartista Óscar González Daher.
Precisamente, el clan del que forma parte el edil habría estado evadiendo nuevamente impuestos inmobiliarios. Una práctica que ya se les había descubierto hace más de una década.
Para poder realizar el relevamiento y adecuación del impuesto inmobiliario, el consorcio tuvo acceso al mapa catastral de Luque, además de imágenes satelitales y otros documentos más.
Con esto se podía conseguir una visualización actualizada de los inmuebles luqueños, a fin de realizar los ajustes necesarios. Sin embargo, a pesar de contar con las nuevas herramientas tecnológicas, nunca hubo actualización sobre la mayor parte de los inmuebles de los González Daher.
Baldíos que no son
Por ejemplo, un caso alevoso de presunta evasión del impuesto inmobiliario es el de una casa ubicada en las inmediaciones del centro de Luque a la que hicieron figurar como baldío ante la comuna.
Las imágenes satelitales del sistema catastral del municipio demuestran claramente que el inmueble no es un baldío.
La propiedad aparece registrada con el número de cuenta corriente catastral 27-3022-17. Básicamente, en los documentos figura “0” metros cuadrados de construcción.
En 2020, Príncipe di Savoia pagó la módica suma de G. 175.731 en concepto de impuesto inmobiliario.
Sin embargo, un recorrido realizado por el equipo de nuestro multimedios reveló que el “baldío” en realidad es una casa que tiene hasta un pequeño quincho
En la zona conocida como Maka’i aparece otro ejemplo de posible evasión. Allí, el mismísimo exsenador González Daher aparece como propietario de dos manzanas identificadas como la 6721 y la 6722.
Todo formaba parte de un solo inmueble; sin embargo, el exlegislador solicitó el loteamiento con el fin de reducir el pago de las tasas inmobiliarias. A pesar de que solicitó el parcelamiento, González Daher mandó amurallar todo el perímetro del inmueble que tiene una superficie total 8.027 metros cuadrados
Al momento de realizar el loteamiento, se debe dejar el espacio suficiente para la construcción de calles. Sin embargo, el muro perimetral “privatizó” una calle que choca contra uno de los portones de la propiedad que corta el paso y obliga a los vecinos a pegar toda una vuelta para poder pasar de una calle a otra.
Por los 16 lotes que forman parte del inmueble, el exsenador cartista pagó en concepto de tasas unos G. 2.500.000, monto que sería varias veces mayor si reconociera que todo se trata de una sola propiedad.
Todo esto ocurrió bajo la mirada de la Comuna luqueña encabezada por Carlos Echeverría Estigarribia, ahijado político del clan que ahora aspira a la reelección.
Pero además, otros datos que permitieron pagos inferiores de impuestos inmobiliarios aparecen en los detalles de las propiedades.
Por ejemplo, propiedades de más de un piso aparecen como que tienen solo la planta baja. Casas que están ubicadas sobre calles asfaltadas, aparecen ubicadas sobre empedrados o hasta en calles de tierra.
En 2010, el diario Última Hora había publicado ya una serie de materiales que evidenciaron la evasión de tributos municipales por parte del exsenador González Daher. En 2016, ABC Color reveló que el entonces titular de la APF, el acusado Ramón González Daher –hermano del exlegislador– no pagaba impuestos por su mansión debido a que la comuna, encabezada por Echeverría, se los había exonerado.