El director de la institución, Eustaquio Esteche, dijo que del primero al sexto grado cuentan con 28 alumnos y que en su mayoría volvieron a clase presencial, pero actualmente entre otras necesidades que tiene la casa de estudio es la falta de agua. Es cierto que el local de madera es precario, pero eso se puede utilizar bien cuando no llueve o haga frío y, además, está en etapa de terminación un moderno salón para aula que está financiado por la Gobernación de Caazapá, sostuvo.
En otro momento, el educador dijo que la urgencia de la escuela es la provisión de agua potable, los niños deben traer el líquido en botellas desde sus viviendas para el aseo personal.
Necesitamos muchas cosas, mobiliarios nuevos, libros, materiales didácticos, pero insistió que el agua es la prioridad para la institución, un pozo artesiano sería la solución.
En otro momento, el docente dijo que ya mandaron a cavar más el pozo, pero con esta sequía no se consigue sacar agua. Además explicó que la gobernación está construyendo un moderno sanitario para los alumnos, por más que se termine la obra seguiremos utilizando la vieja letrina por la falta de agua.
En ese sentido, el representante de los padres de familia, Herminio Santacruz dijo que están contento con la construcción de un salón para clase, que seguirán luchando para conseguir otro para el año que viene, para eliminar el bloque de madera, pero el problema más grave es el tema del agua. Los vecinos ya no tenemos casi agua, solicitamos a las autoridades la construcción de un pozo artesiano.
Enseñan en precario rancho de madera
En otro momento dijo que tal vez se pueda solucionar si las comunidades de la colonia Domingo Martínez de Irala y Jhugua-í, cuyos pobladores envían a sus hijos a esta escuela, consiguen la instalación del sistema de agua corriente, así se podrá dotar a la escuela del vital liquido, pero las distancias son grandes, sostuvo el poblador.