Los agentes fiscales Federico Delfino, Lorenzo Lezcano y Andrés Argüello ingresaron este mediodía en la zona en donde ayer miembros del grupo criminal EPP detonaron dos bombas dejando una vez más muerte y destrucción a su paso. Igualmente, acompañan la comitiva técnicos de Antisecuestro y Criminalística para recoger los pedazos del camión militar, a fin de determinar qué tipo de artefactos explosivos se utilizaron y analizar las vainas servidas de las armas de fuego que quedaron regadas en el camino rural de San Pedro.
Según los técnicos, se detonaron dos bombas, una de ellas fue a presión, accionada cuando el camión Mercedes Benz de uso militar pasó encima. Esto generó una gran destrucción, pues quedaron pedazos de hierro del rodado hasta 100 metros de donde se originó la detonación. Además en el camino terraplenado quedó un profundo pozo, lo que describe plenamente la efectividad de la bomba.
Luego, a 700 metros del lugar de la primera detonación, se realizó otra explosión, que fue de manera manual. Se cree que esta tenía por objetivo cubrir su huida de los criminales, explicó el corresponsal Omar Acosta.
Una vez más el grupo criminal deja a su paso muerte, destrucción y sobre todo dolor a familias inocentes con sus cobardes ataques. El camión de uso militar se diseminó en más de 50 pedazos; no quedó una pieza en su lugar. Si bien el EPP tiene un gran poder de destrucción, actúa de manera cobarde, con sus miembros escondidos en el monte, esperando una emboscada, asesinado a personas inocentes.
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El atentado fue perpetrado a las 14:30 ayer, luego de que un convoy se retirara de un destacamento militar en Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro. El grupo fue emboscado cuando recorría un camino en el interior de una estancia, ya en el límite con Concepción y Amambay.
En la emboscada murieron el sargento 1° de Infantería Lauro Ramón Monzón Acosta (30), el sargento 1° de Infantería Eulalio Espinoza (29) y el sargento 1° de Material Bélico Mauricio Pérez Paredes (26). En tanto que otros 8 militares tuvieron un cruce de balas con los miembros del grupo criminal que luego de cometer el atentado se mimetizaron en el monte.