El Ministerio del Ambiente tiene también un mapa de focos en áreas silvestres protegidas de la fecha. Según el gráfico se dividió la muestra en categorías Reserva de la Biósfera y Parque Nacional. Con relación a la Reserva, se refiere al Gran Chaco donde hay 37 focos. En lo que tiene que ver con el Parque, que es en Río Negro, existen 13 focos. Con esto la cifra redonda es de 50 lugares que tienen la atención de los expertos. Por lo que se observa en gran parte de las áreas silvestres hay inconvenientes. En algunos puntos con mayor extensión y otros en menor proporción.
El director de Biodiversidad del Mades, Rafael Sosa, aclara que hay diversos factores que se conjugan para que se dé este fenómeno. Por ejemplo con lo que sale de los caños de escape de motos, la colilla de cigarrillo y además que el pasto está muy seco por las heladas. Sosa no descarta también que personas irresponsables prendan fuego para hacer asado y luego no lo apaguen como se debe. Los parques que tienen límites con rutas nacionales son los que corren más riesgo.
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A fin de evitar lo que el año pasado causaron los incendios forestales, ahora cada día los guardaparques reaccionan rápidamente ante el mínimo foco. Tienen a mano cisternas en camionetas, un rastrillo especial y mochilas con agua. Si de repente la situación se complica se llama a los bomberos. Ahora bien, este plan de control evidencia la necesidad de más guardaparques, porque a mayor territorio descuidado, más posibilidades de que inconscientes prendan fuego.
Existen 2.400.000 hectáreas de áreas silvestres que están bajo responsabilidad del Mades mientras solo se cuenta con 83 funcionarios para el cuidado. Un promedio de 4 a 5 por cada parque Nacional. Sosa resaltó que los socios de la Asociación Rural del Paraguay también colaboran en la prevención. Con la verificación se tienen los sectores georeferenciados y se tienen ubicados pozos artesianos, además de la presencia de cisternas y de pistas de aterrizaje para recarga de agua para los aviones, si eventualmente se precise de refuerzos por algún evento de gran magnitud.
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Tanto la SEN, como el Mades y el Instituto Forestal Nacional tienen el sistema satelital para monitorear y cada día van sacando reportes nuevos. Según Sosa, los focos son cambiantes en cuanto a cantidad y áreas.
El Gobierno paraguayo coordina tareas de prevención con su par de Bolivia. Esto debido a que el año pasado se registraron numerosos incendios desde el país vecino. El otro mal que enfrentan habitualmente las autoridades son los cultivos de droga dentro de los parques. Situación hallada en varias ocasiones y desmanteladas por los encargados del combate al narcotráfico.
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