El agua en estos momentos es considerada “oro puro”, por la importancia que representa, dijo don Lazaro Bordón, poblador de San Carlos distante a unos 110 km del casco urbano de Fuerte Olimpo. El hombre agradecía el poder recibir el vital liquido transportado en camión cisterna.
“Ya no podemos consumir agua del tajamar por que esta prácticamente contaminada”, decía la señora Florencia Balbuena, al momento de colocar sus recipientes como tambor y algunas latonas donde descargar el vital liquido desde el cisterna.
Falta de lluvia agudiza sequía en el Chaco
El camión cisterna cargando 16.000 litros de agua potable cedido de manera gratuita por la Junta de saneamiento de Fuerte Olimpo, distribuía a cada familia en los pocos reservorios que tenía.
Al respecto Narciso Acosta, conductor del camión mencionó que se tarda unas 4 horas para llegar a esta comunidad, pero que representa toda una gran alegría el poder satisfacer la necesidad de estos compatriotas.
Otra de las poblaciones que permanente es asistida con el acarreo de agua, es Toro Pampa, distante a 65 km de Fuerte Olimpo.
Las personas que viven en estas comunidades dependen de tajamares para el uso del agua, sin embargo debido a la falta de lluvias en la zona, estos reservorios prácticamente se están secando y el poco liquido que aun resta, ya es lodazal, lo que pone en riesgo la propia salud de las personas.
Desde marzo no se producen lluvias de grandes volúmenes en el Alto Paraguay, en tanto que la Dirección de Meteorología anuncia que las precipitaciones grandes, recién se darán en octubre o noviembre, por lo que de ser cierta esta información, la temporada de sequía sera bastante dura.
La temporada seca por la falta de lluvias, sumada a las altas temperaturas que se registraron últimamente, posibilita que la vegetación de la zona sean verdaderas chispas para el inicio de los incendios, que se están dando de manera constante, ante la inconsciencia de las personas.
Esto pone en riesgo la actividad ganadera, puntal de la economía en el departamento, y también a los bosques nativos, refugio de números animales silvestres, varios de ellos inclusive en vías de extinción.
Se inicia también la temporada de los fuertes vientos del sector norte, que acelera cualquier tipo de incendios, generando un ambiente totalmente contaminado por el polvo y el humo, propicio para las enfermedades respiratorias en pobladores de la región.