Delfino contó que estos criminales que secuestraron a Ríos el pasado lunes 28 de junio y lo asesinaron el sábado 3 de julio en una localidad brasileña llamada Caracol actúan de forma violenta y que causan zozobra no solo en la zona, sino en todo el país. El fiscal añadió que tienen apoyo logístico de personas que simpatizan con ellos o les tienen miedo porque se desplazan muy rápidamente en la zona.
“Están infundiendo el terror no solo en ese lugar, sino en todo el país. Podemos especular que sea solo ese número en la parte operativa (seis integrantes), pero no descartamos que tengan mucho apoyo logístico. Su zona de acción es la zona norte del departamento de Concepción… Bella Vista Norte, en Amambay, San Alfredo, Puentesiño, están formando allí un pequeño triángulo”, explicó.
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Quienes lideran este grupo llamado ACA-EP serían los hermanos Hugo y Feliciano Bernal Maíz, quienes fueron expulsados del EPP y del Ejército del Mariscal López (EML) por indisciplina y refundaron en 2019 la extinta ACA.
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“Tenemos una muerte violenta (la de Jorge Ríos). Este grupo, liderado por los hermanos Bernal Maíz, en setiembre de 2012 dio una muerte bastante violenta a una tía de ellos porque pensaron que ella era supuestamente informante de las fuerzas de seguridad. Tenemos referencias de las actuaciones de varios integrantes de esa familia de la extrema violencia con la que actúan siempre”, agregó.
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Sobre la muerte de Ríos, indicó que la investigación sigue en curso. “La investigación en el Brasil la estamos chequeando, se inició ni bien tuvimos esta información y con ciertos datos pusimos al tanto de eso a la Policía Federal (…) pero tenemos que manejar ciertas cosas con sigilo por respeto al dolor de la familia. Determinar que se ideó en un país o en otro es especular mucho, tenemos una acción que se inició en nuestro país y cuyo resultado, por el hallazgo del cadáver, se dio en otro. Estamos trabajando en eso”, sostuvo.
Finalmente, sobre una nota encontrada el viernes pasado en el aserradero del señor Ito Silguero, empresario de Paso Barreto, departamento de Concepción, en la cual exigían una suma millonaria al propietario para que su hija no sea secuestrada, indicó que no está confirmado que haya sido redactada por los miembros de la ACA-EP.
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“Muchas personas valiéndose de este tipo de hechos podrían estar valiéndose de ellos para obtener de forma ilegítima dinero. No solo se dio hacia Paso Barreto, sino en varias colonias menonitas hacia San Pedro, donde criminales buscaron beneficios económicos, no asociados a estos terroristas”, finalizó.