La economía en general exhibió un tibio crecimiento en la primera parte del año; sin embargo, al desagregar por sectores se aprecia un comportamiento diferenciado. Así, los datos muestran que el sector de las construcciones fue uno de los más dinámicos con una expansión del 14% en este primer trimestre. Este repunte se debe al desempeño tanto de las obras públicas encargadas por el Gobierno, como también de emprendimientos privados. Aunque esta cifra podría atenuarse, por menor participación esperada del Gobierno para inversión en obras.
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Miguel Mora, economista jefe de la banca matriz precisó que el Gobierno en su plan de reducir el déficit fiscal al 4% en este año, había anticipado que reducirá sus gastos en inversiones, por lo que estima que el crecimiento de las construcciones se irá moderando en los próximos trimestres. No obstante, las obras en el sector privado siguen en aumento. Esta dinámica permite a las demás industrias y servicios relacionados a la producción y venta de insumos como cementos, varillas, y otros.
Otro de los segmentos que destacaron en el primer trimestre del año fue el de la ganadería que exhibió un crecimiento del 9,8% con un elevado nivel de faenamiento, impulsado por las exportaciones y mejores precios. En lo que respecta a las industrias presentaron un crecimiento del 4,8% y se destacaron principalmente las de producción de papel, metálicos y textiles.
Tímido repunte en servicios
Por su parte el sector Servicios tuvo una tímida expansión, de 0,9% y de esta manera sale de la zona de retracción que se mantuvo en los últimos 3 trimestres anteriores en el 2020. En este segmento también se observa un crecimiento mixto, por un lado destacaron los repuntes en los servicios de telefonía, financieros, por otro lado, los servicios de turismo, hotelería, gastronomía, eventos presentan retracciones en comparación al año pasado.
Fuerte caída de la agricultura
En el grupo de sectores que presentaron retracciones está el sector agrícola, que a diferencia del año pasado cuando destacó como uno de los segmentos más dinámicos, este año no logró alcanzar los niveles de producción del 2020; a esto se suma el retraso en la siembra que también tuvo un efecto estadístico, sobre todo en los dos primeros meses del año. En consecuencia, este primer trimestre del año, el sector agrícola registró una caída del 10,9%, aún incorporando los mejores precios.
Sin embargo, los técnicos del BCP estiman que la cifra irá mejorando en los próximos trimestres, con la regularización de los envíos, además del efecto precio que tendrá una incidencia importante para el rubro.
Según el informe del BCP, al excluir del cálculo del PIB a la agricultura y las binacionales, el resultado de crecimiento económico se eleva al 2,8%.
Finalmente, el BCP informó que las inversiones sostuvieron el crecimiento por el lado del gasto, con una expansión de 11,4% impulsado principalmente por las construcciones, mientras el consumo privado sigue en terreno negativo y el de gobierno se redujo en 4,2%.
Pese al tímido crecimiento de este primer trimestre, el BCP mantiene por el momento su proyección para el PIB anual en 3,5% para el presente año.
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