Se trata de un protocolo que debe ser aplicado de forma obligatoria en el marco de las elecciones del 20 de junio y el 10 de octubre, por los candidatos, los votantes y los funcionarios electorales.
Rige en la campaña, los días de capacitación, el día de las elecciones en los locales de votación y las tareas que realizará el TSJE en todo el país.
Por ejemplo, para los candidatos, “en caso de visitas casa por casa, los candidatos/colaboradores deberán mantener sus burbujas de acompañantes en número constante y no permitir que se agreguen personas de la comunidad a medida que avancen en sus recorridos. Evitar el contacto estrecho y limitar el saludo tradicional (evitar abrazo, beso, apretón de manos). Velar por el cumplimiento del distanciamiento indicado en todo momento, en caso de fotos y/o selfies no quitarse la mascarilla”, señala.
Dispone qué medidas se deben cumplir para la preparación de los materiales electorales, el manejo en los depósitos y la distribución.
Establece cómo los funcionarios deben proceder para el voto en casa y en los locales de votación pide tener una entrada y una salida, usar cintas divisoras para separar la circulación de los votantes, etc.