Los fiscales Carlos Maldonado, Irene Álvarez, Gedeón Escobar y Lorenzo Lezcano presentaron esta noche la conclusión de su investigación y acusaron a la madre, L.M.Z. y a su pareja R.O..
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De momento no prosperó la última estrategia procesal de la madre, que en una declaración indagatoria solicitada por la misma y donde no aceptó preguntas de la Fiscalía, intentó apuntar a su propio padre y abuelo de la pequeña de pedofilia.
La desaparición de la pequeña de 7 años se produjo el 5 de abril del año pasado, mientras supuestamente se encontraba jugando con una cabras en un complejo habitacional en construcción conocido como “Monte Pacará” en Emboscada.
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A criterio de la Fiscalía hubo negligencia tanto de la madre como de su pareja, lo que permitió la desaparición de la niña, sobre la cual hasta el momento no se tiene pistas ni indicios de su paradero.
La acusación se dió casi al filo del cierre del día, atendiendo que los fiscales ya se encontraban al límite del plazo procesal para presentar su requerimiento conclusivo.
La causa por supuesta pronografía infantil -que por cierto hace que no se puedan divulgar los datos de ninguno de los involucrados por precautelar los derechos de la menor-, sigue con R.O. como imputado y aún hay plazo para presentar la acusación, ya que dicha investigación se abrió con posterioridad.
Recién en los últimos días se pudieron sobreponer las acciones presentadas por el abogado del hombre, que impedían la realización de la pericias a las evidencias en este último caso.
También ayer se informó que faltan las muestras de ADN del padre de la niña, que reside en Francia, para poder comparar con muestras de presunta sangre humana encontrada en la propiedad donde se produjo la desaparición.