Dicha iniciativa, que tiene media sanción de la Cámara de Diputados, es vista de manera positiva y genera expectativa en una gran cantidad de sectores que apuestan a modernizar los mecanismos de transacción y gestión en Paraguay, teniendo en cuenta la situación de pandemia y la necesidad de garantizar la transparencia y seguridad de los procesos online.
Varios expertos coinciden en señalar que de aprobarse la propuesta, se podrán gestionar documentos desde cualquier parte del país, sin necesidad de acudir a una oficina y sin necesidad de tener acumuladas hojas de papeles.
La iniciativa permitirá crear una herramienta electrónica para que paraguay pueda dar un salto cuántico en la transformación digital de los servicios públicos y privados, de manera a agilizar los mismos y volverlos más eficientes, señalaron los expertos.
Actualmente la ley de firma electrónica permite la firma en el mundo digital, pero esta ley crea la posibilidad de libre oferta y demanda de entes certificadores, no solo la firma electrónica, sino la identidad, y elementos del mundo digital que van a reemplazar los documentos papeles, sellos, y que al no existir estos elementos digitales, impiden a las instituciones públicas y privadas evolucionar.
La cédula electrónica será una de las herramientas, al igual que la firma electrónica que permitirá autenticar las transacciones o gestiones que sean realizadas en los entes públicos y privados.
Este nuevo marco jurídico sería aplicable a toda clase de transacciones y actos jurídicos, públicos o privados, así como en los procesos privados, judiciales y administrativos tramitados electrónicamente.
Dicho proyecto prevé incorporar nuevos servicios de confianza y armonizar la normativa paraguaya principalmente al Reglamento (UE) Nº 910/2014 del Parlamento Europeo y del Consejo, relativo a la identificación electrónica y los servicios de confianza para las transacciones electrónicas