Según la Dra. en Ciencias Veterinarias Monserrat Viveros, la dermatitis canina es una inflamación superficial de la piel, caracterizada por rubor o enrojecimiento, calor, hinchazón, dolor o aumento de la sensibilidad y alopecia (perdida de pelo) en la zona afectada. La piel puede llegar a perder su función de barrera protectora y de defensa pudiendo llegar a permitir el paso de patógenos o ser más frágil a agresiones del medio externo.
La piel constituye la principal barrera estructural de defensa del organismo frente a agentes externos y tiene tres capas:
- Epidermis (la más superficial).
- Dermis (la parte viva con vasos sanguíneos, folículos pelos y más).
- El tejido celular subcutáneo (con riego sanguíneo y muchas terminaciones nerviosas).
Síntomas de la dermatitis
La veterinaria manifestó que los principales síntomas de la dermatitis pueden ser picor o comezón, donde se evidencia que la mascota se frota con las superficies, se rasca de manera continua, se lame con frecuencia, se pellizca con los dientes o incluso se muerde produciendo lesiones más profundas y dando oportunidad de alojarse a parásitos externos, bacterias, microorganismos patógenos que pueden producir el agravamiento del problema de piel.
Causas son múltiples:
- Algunas afectan a aquellas mascotas que tienen sensibilidades -como alergias- a sustancias irritantes como los agentes tóxicos, químicos, el cloro de la pileta, los productos de limpieza de la casa, los componentes de las pinturas, plantas tóxicas, metales o alergenos.
- Algunas mascotas son susceptibles a picadura de mosquitos y otros parásitos, como las moscas, que producen miasis, colonización por levadura, bacterias, hongos etc.
- Disposición genética (dermatitis atópica) eccemas por falta de una proteína de la piel llamada filagrina que predispone a estas afecciones.
La microbiótica
Cada vez se sabe más sobre las bacterias, virus, hongos o incluso parásitos del intestino, lo que se llama “Microbiota”, el papel en el sistema inmunitario e incluso su comportamiento en las personas y animales.
“La microbiota interacciona con el sistema inmune para generar un mecanismo de tolerancia y se ha visto que en dermatitis atópica hay una alteración de esta” mencionó Viveros.
Para dar con el diagnóstico de si es una dermatitis o es una combinación de patologías primeramente se debe descartar la lehismaniasis, hay dos formas: una es la cutánea y la otra es visceral.
El primer análisis laboratorial sería de lehismaniasis, junto con un raspado para descartar parásitos, sarna, bacterias, hongos y luego proceder a encontrar el diagnóstico exacto para el problema de piel de nuestra mascota.
Tratamiento de la dermatitis
La especialista en animales agregó que “el tratamiento de la dermatitis dependerá de los resultados laboratoriales, ya descartadas las afecciones normales que pueden tener las mascotas, de acuerdo a cada individuo según sus síntomas y los datos recolectados con los dueños de los mismos, queda a criterio médico. Es muy importante el diálogo del médico veterinario con los dueños y que sean lo más sinceros posibles para llegar a un diagnóstico eficaz” puntualizó.