El objetivo de dicho gremio es colaborar en la lucha contra la pandemia, debido a la situación extremadamente delicada por la que atraviesa hoy todo el sistema de salud, informó el presidente de Cafap, Víctor Muñoz, a través de una nota dada a conocer esta mañana.
El mismo considera prioritario que la población tome las medidas voluntarias para disminuir la circulación del virus y que una de estas medidas sea que el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS) libere la venta y utilización de los denominados test rápidos. Explicó que se disponen tres formas de testear el COVID-19: primero, el PCR; segundo, el test de antígenos, y tercero, el test de anticuerpos.
Añadió que las PCR-ARN detectan el material genético del virus. Los test de antígenos detectan las proteínas del virus. A su vez, los test de anticuerpos detectan los generados frente al virus (IgM e IgG).
Argumentó que tanto el PCR como el test de antígenos detectan el virus, permitiendo diagnosticar la infección en el paciente, mientras que los test de anticuerpos detectan la respuesta generada por el organismo frente al virus (anticuerpos IgM e IgG.). Señaló que a los test de antígenos y anticuerpos se los denomina comercialmente como “rápidos”.
“Los test rápidos son más sencillos de practicarlos; al respecto, una medida que creemos puede ayudar al autocontrol de los ciudadanos es que los mismos puedan adquirir y realizarse los test denominados rápidos en las farmacias. La realización de estos test ayudará a que los ciudadanos enterados de su situación restrinjan sus actividades familiares y sociales, así como empresas puedan avisar a sus colaboradores y aislar a los sospechosos”, indica la nota dirigida al ministro Borba.
Según el argumento de la Cafap, “por las experiencias en otros países, esta información es privada, pero cuando se dan casos positivos los ciudadanos acuden al test PCR que brindará la información oficial epidemiológica, por lo que el Ministerio de Salud podrá seguir manejando las estadísticas de la enfermedad y tomar medidas en consecuencia”.
El gremio de farmacias insiste en que el MSPyBS se digne a liberar la venta de test rápidos de COVID 19 en farmacias por un plazo determinado a fin de que sirvan como elementos de autocontrol para los ciudadanos y empresas. Estos test ya están disponibles en el país en algunos laboratorios.
Colaborar con el Gobierno
La Cafap también expresó su intención de colaborar en la estrategia de distribución de vacunas contra el COVID-19.
En este punto en particular, el gremio pone a disposición de las autoridades sanitarias toda la logística con su capacidad de almacenamiento y distribución de sus cadenas asociadas en gran parte del territorio nacional, en caso de que se requiera para la vacunación de la población.
Asimismo, a los efectos de la vacunación contra el COVID 19 impulsada por el Gobierno nacional, solicita que se considere al personal de las farmacias como de salud prioritario y que pueda ser vacunado después del personal de blanco de los centros médicos.
Señalan que la propuesta se debe al hecho de que el trabajo que desarrollan los trabajadores en las farmacias es un servicio esencial para la sociedad y más aún en pandemia, porque hay que considerar que la red de farmacias de distintas cadenas ubicadas a lo largo y ancho del país ayuda a que los ciudadanos no tengan que concentrarse para utilizar los servicios ofrecidos.
El gremio
La Cafap reúne a las siete cadenas de farmacias más importantes del país, que suman alrededor de 700 locales y que emplean a cerca de 7.000 personas de forma directa. Están asociadas: Puntofarma, Farmacenter, Catedral, Oliva, Farmatotal, Vicente Scavone y Energy.