El asalto tipo comando se produjo poco antes de las 05:00 de ayer en la entrada al supermercado Real que funciona sobre la Ruta PY01 (ex Acceso Sur), en Fernando de la Mora.
El único guardia que estaba en el lugar fue sorprendido por al menos 10 hombres fuertemente armados que llegaron en una camioneta Toyota Hilux y en un auto Toyota IST.
Los malvivientes se organizaron en dos grupos y dinamitaron los cajeros del Banco Atlas y del Banco Nacional de Fomento (BNF), que funcionan a unos 30 metros de distancia.
Según la Policía, los asaltacajeros utilizaron la cantidad justa de explosivos para solamente abrir las máquinas, sin tener que destruirlas por completo. De hecho, fue tan precisa la detonación que les permitió a los criminales sacar íntegramente las bandejas que contienen los billetes.
Según la Policía, ambos cajeros fueron recargados el fin de semana, por lo que aún tenían una cantidad importante de plata.
Cada máquina puede almacenar hasta G. 500 millones, siempre según datos de la Policía, institución que al menos hasta anoche no había recibido el reporte de la cantidad del dinero robado.
Tras cometer el delito, la gavilla escapó del lugar e hizo trasbordo presuntamente en otros dos vehículos, aunque la Hilux y el IST no fueron localizados.
La que sí apareció abandonada fue una camioneta Hyundai Santa Fe que aparentemente se usó para la fuga. Este rodado fue denunciado como robado en Asunción.
Entintado de billetes
Un elemento que llamó la atención ayer, en la escena del robo, fue que no había rastros de que el sistema de entintado de billetes se haya activado.
Este es un mecanismo antirrobo que entró en vigencia en 2015 y que consiste en el derramamiento de un líquido rojo que mancha los billetes ni bien se produce una explosión.
El Banco Atlas confirmó que su cajero sí tenía activado ese dispositivo.
Los investigadores, en tanto, dijeron que probablemente la tinta de seguridad estaba almacenada en el mismo compartimento en el que había las bandejas de dinero que fueron robadas. Esto quiere decir que seguramente los billetes quedaron manchados dentro de las bandejas sustraídas.
Policías de Crimen Organizado fueron designados para investigar a esta banda que reapareció luego de seis años.
Bancos analizan la situación
Desde la Asociación de Bancos del Paraguay (Asoban) manifestaron que están recogiendo información de las entidades bancarias afectadas en la explosión de dos cajeros automáticos en un atraco este martes. Este hecho se da nuevamente luego de 5 años; ya que desde el 2015 se viene implementando un sistema de seguridad en cajeros consistente en el entintado de billetes, con lo que se logró reducir el incentivo de los asaltacajeros.
Efectivamente, nos sorprendió. Estamos aún recogiendo información de los colegas, pues los dispositivos están ampliamente instalados, indicó al respecto Raúl Vera, titular de la Asoban.
Tras recabar la información relevante, analizarán la situación en particular y los sistemas preventivos, a fin de evitar más casos similares.
Desde la implementación del entintado, no se registraron hechos de robos, aunque sí hubo un par de intentos. El sistema se activa ante señales de forcejeo o violencia y mancha los billetes, los cuales ya están inhabilitados para usarse en el mercado.
El último atraco con bombas fue en Mariano Roque Alonso
El último gran ataque con bombas contra un cajero automático, hasta antes de los dos consecutivos que se produjeron ayer en Fernando de la Mora, se llevó a cabo la noche del 27 de mayo de 2015.
En aquella oportunidad, la máquina afectada fue la del Banco Itaú, que funcionaba en la farmacia Punto Farma del kilómetro 17 de la Ruta Transchaco, en Mariano Roque Alonso.
Sin embargo, ese robo resultó fallido debido a que cuando la gavilla voló el cajero se activó el sistema de entintado de billetes que a su vez manchó toda la plata que pretendían robar los criminales.
Dicho atraco es muy recordado hasta ahora por los agentes de la Policía Nacional porque justamente constituyó el fin de la “epidemia” de atracos a cajeros automáticos, que se agudizó entre 2014 y 2015, cuando se produjeron al menos 25 golpes.
Como la mayoría de los cabecillas de esa banda ya están presos, entre ellos el célebre criminal Amado Ramón Benítez, se sospecha que la que actuó ayer es una nueva organización.