Hoy de vuelta se cerró la jornada con una cifra altísima de internados graves en UTI y Pintos remarcó, por más que las cifras lo dejen claro, que “estamos mal” en cuanto a niveles de contagio y ocupación sobre todo de las camas de terapia.
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Mediante el convenio con los hospitales privados “hay más de 100 camas de internación en sala general. El problema son las terapias”, enfatizó. Aunque no minimizó la cifra de 1.316 internados en salas comunes, que de los cuales un grupo eventualmente podría requerir más adelante ingresar a UTI si sus cuadros se complican.
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La preocupación no es solo de las autoridades del Ministerio de Salud, también los gremios de médicos, sobre todo los terapistas, que advierten sobre el agotamiento del personal de blanco y sobre los elevados porcentajes de contagios nuevos diarios. La Sociedad Paraguaya de Infectología se sumó a la advertencia hecha por la Sociedad Paraguaya de Medicina Crítica y Cuidados Intensivos sobre el riesgo de colapso de los sistemas de Salud.
De hecho, las sociedades científicas mantuvieron una reunión en la fecha con el Ministro de Salud Julio Borba y le plantearon la posibilidad de imponer restricciones más severas durante la Semana Santa.
Hasta el momento, Salud no ha hablado de endurecer las medidas mediante un retroceso de fases, sino más bien del que se cumplan las disposiciones actuales, sin embargo, ante el planteamiento de sectores médicos, sectores sociales de la economía ya se adelantaron en pronunciarse en contra de un retroceso, alertando que sería letal para la economía volver a cerrar y parar actividades.