Según contaron testigos, el conflicto entre la Policía y los manifestantes comenzó cuando llegó la hora 00:00 y los ciudadanos habían dicho que si Mario Abdo Benítez no renunciaba como titular del Ejecutivo, comenzarían a tomar acciones más radicales.
Así fue como un grupo comenzó a arrojar piedras, lo que dio origen al enfrentamiento, que involucró persecución policial y corridas por toda Mariscal López.
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En medio de los disturbios en el lugar se oyeron incluso varios disparos y se utilizaron además gases lacrimógenos y carros hidrantes para intentar controlar la situación.
En medio de la refriega, un grupo de manifestantes trató de pasar uno de los vallados de Mburuvicha Róga y esto provocó más represión policial. El comisario Juan Pereira confirmó que existieron aprehendidos pero que no estaban confirmadas sus identidades.
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Aprehendidos denunciaron violencia policial
La Policía Nacional llevó a 8 aprehendidos hasta la sede de la Comisaría 6°, donde se incautaron algunas evidencias de los mismos, entre ellos cartones de vino, celulares y armas blancas. Uno de los aprehendidos contó a ABC TV que él estaba manifestándose pacíficamente cuando los policías lo golpearon brutalmente. Reconoció que estaba ingiriendo bebidas alcohólicas pero agregó que eso no es motivo para que los uniformados utilicen una fuerza excesiva. Denunció que la Policía hizo un mal procedimiento y que fue violenta en todo momento.
Otros aprehendidos, desde sus calabozos, se expresaron en similar sentido y relataron a ABC TV la violencia que sufrieron. Contaron que los antimotines les dieron patadas y que los golpearon incluso ya estando en el piso. Denunciaron que sin que ellos agredieran les dispararon con balines de goma y les lanzaron gas lacrimógeno.
El doctor Christian Legal, profesional médico que fue convocado para inspeccionar a los aprehendidos, afirmó que todos ellos tienen lesiones superficiales y que ninguno presenta estado de gravedad.
“Se intentó dialogar”
El comisario Silvino Leguizamón, director de la Policía Metropolitana, refirió que “hasta el último momento” intentaron dialogar con los manifestantes, pero que los “inadaptados”, intentaron pasar la valla de Mburuvicha Róga, por lo que se les explicó que “hay una normativa que lo prohíbe”. Como de todas formas los manifestantes atropellaron el dispositivo de seguridad, tuvieron que frenarlos, según relató.
El jefe policial indicó además que todos quedarán esta madrugada en carácter de aprehendidos, hasta que algún agente fiscal del Ministerio Público ordene su detención.
Finalmente, el comisario Leguizamón aseguró que el momento tenso ya pasó y que ahora tanto las inmediaciones de Mburuvicha Róga como el microcentro se encuentran en calma.
La chispa de la explosión
La actual situación se originó a principios de esta semana con protestas de enfermeros y de familiares de pacientes con covid que denunciaban la falta de insumos en la red sanitaria pública.
A ello siguieron posteriormente las denuncias de ventas de fármacos y posteriormente, el viernes, la renuncia del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, lo que sin embargo no evitó la serie de protestas.
En el transcurso de la marcha, Abdo Benítez, anunció el sábado en un mensaje televisado la renovación de cuatro de sus ministerios, entre ellos el de Salud y Educación, “en aras de la pacificación” y ante las expectativas de la ciudadanía.
El mandatario aseguró que la libertad de expresión está garantizada en el país, pero no hizo autocrítica de la actuación policial del viernes contra ciudadanos que denunciaban su gestión de la pandemia y la escasez de medicamentos en los hospitales públicos.
Día un poco más tranquilo
Este sábado, centenares de personas marcharon por el microcentro de Asunción para denunciar la gestión gubernamental de la pandemia y exigir la renuncia del presidente del país, Mario Abdo Benítez, en medio de una crisis sanitaria y la consecuente crisis política.
Se trata de la segunda jornada consecutiva de protestas de ciudadanos autoconvocados en el centro de Asunción, después de que el viernes la Policía dispersara una concentración similar haciendo uso de balines de goma y gases lacrimógenos.