“Tenemos unas 9 a 10 camas por ahí disponibles a nivel país, que no es nada y en área Central no tenemos ninguna, si ahora un paciente necesita, lo vamos a trasladar al sector privado, donde ahora tenemos 31 pacientes”, destacó Pintos, que recordó que actualmente hay 31 internados en sanatorios privados. Hoy de vuelta se registró un nuevo record de pacientes en UTI.
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La situación no es muy distinta a nivel de Terapias Intensivas para niños, donde hay una ocupación del 95%, en este caso no solo por pacientes pequeños con covid-19, sino también por un aumento de prematuros.
En síntesis, con la decena existente en hospitales del interior y las 48 restantes en el sector privado, hay poco menos de 60 lugares en UTI a nivel general. “A veces a mi me da hasta miedo decir nos queda tantas camas libres porque se me hace que con eso la gente dice hay todavía camas libre, me voy a relajar, entonces la gente relaja con los números. Ojalá que la gente tome conciencia porque si seguimos así nos puede ir muy mal”, insistió.
No solo las terapias están sobre exigidas, hay muchos pacientes en las urgencias esperando ingresar a UTI. Un problema general que ya vienen advirtiendo hace tiempo es que los pacientes que requieren cuidados intensivos llegan ya con un daño muy avanzado a consecuencia del covid-19.
“Insisto mucho en que la gente para que al mínimo síntoma que tenga de fatiga, es decir: se baña y se fatiga, si come y se fatiga, si camina por la casa y se fatiga, tienen que consultar, porque hay gente que dice: se siento y me va a pasar y en todo caso reposa, pero eso es lo que está muy mal, por qué el pulmón se daña severamente”, comentó.
De hecho, invitó a todos aquellos que sientan esos síntomas a que acudan sin temor, porque en camas comunes si hay lugares y en ellas pueden recibir tratamiento para evitar daños severos que impliquen un ingreso a UTI. “En las camas normales de internados, la ocupación no es alta. Tenemos la mitad de las camas todavía, de entre 55 y 60% están ocupadas. Eso quiere decir y te da la pauta de que los pacientes que llegan son más grave, no dan ya para internarse en una sala normal. Distinta sería la historia si la gente se interna en una sala normal y ya se le asiste previamente antes de estar completamente el pulmón dañado”, sostuvo.