El crimen del odontólogo Enrique Antonio Silgueira Solalinde, de 28 años, habría sido financiado por el tío de la víctima, el jefe narco Erwin Jorge Solalinde Krause, alias Koki, de 43 años, según la información suministrada a los uniformados por los propios allegados al joven fallecido.
Los parientes del muchacho dijeron que la única amenaza que tenía Enrique era justamente de su tío apodado Koki, según los datos obtenidos ayer.
Elevada condena
Solalinde Krause cumple una condena de 24 años de encierro luego de haber sido capturado por la Senad el 29 de abril de 2016 en Villeta, cuando supervisaba en un puerto clandestino del río Paraguay el envío de 18.900 kilos de marihuana que debían llegar en barco a Uruguay.
Aquel fue hasta ese momento el segundo mayor cargamento de la citada droga que haya sido incautado en la historia del Paraguay.
Sin embargo, “Koki” Solalinde ya había sido arrestado dos años antes, cuando manejaba el negocio de ordeño de combustible en la misma zona de Villeta.
Prestanombre
Según los datos filtrados, el narco Solalinde habría dejado a su sobrino Enrique la administración de la mayoría de las propiedades y otros bienes adquiridos con el dinero del ordeño y el narcotráfico.
Últimamente, “Koki” Solalinde empezó a pasar necesidades en la cárcel y le pidió a su sobrino que venda algunos inmuebles y le llevara el dinero a la prisión.
Sin embargo, el último pedido hecho por el convicto a su sobrino habría sido que rematara una propiedad de la familia, a lo que el joven odontólogo ya se negó.
A consecuencia de esto, el narco recluido habría advertido con mandar liquidar a su sobrino y prestanombre Enrique Antonio Silgueira Solalinde.
Supuestamente, “Koki” Solalinde le mandó a decir a su sobrino que su vida costaba solamente G. 3 millones, en referencia al precio que cobrarían los sicarios.
El atentado
La amenaza, efectivamente se cumplió el viernes aproximadamente a las 21:30, cuando Enrique salió de su casa supuestamente para concretar la venta de una motocicleta, que la venía ofreciendo en las redes sociales.
Aparentemente, los propios sicarios fueron quienes lo contactaron con el pretexto de comprarle el biciclo y luego le dispararon por lo menos tres tiros en el pecho.
El caso de sicariato se llevó a cabo sobre la avenida Mariscal Estigarribia del barrio Rincón de Guarambaré, cerca del hospital del Instituto de Previsión Social de la ciudad, a 800 metros de la ruta Guarambaré-Villeta y a 2.600 metros de la rotonda formada con la ruta PY01 (Acceso Sur).
El automóvil Toyota Vitz usado por los matones fue hallado abandonado ayer de madrugada en el barrio Caaguazú de Ñemby, incendiado parcialmente. El rodado fue robado el 7 de enero pasado en Asunción.