Los pobladores comentaron que un día se instalaron en las cercanías de una estación de bombeo de agua de un arrocero, con el objetivo de pescar en el río Tebicuary, y pudieron constatar que las bombas paran de día, pero funcionan desde que oscurece hasta el amanecer llevando agua hacia los campos de arroz. Como las esporádicas fiscalizaciones se realizan de día, no son sorprendidos bombeando agua en forma ilegal.
Gustavo Barboza Sisul, uno de los pobladores preocupados por la situación del río, quien años atrás fue el presidente del Consejo de Agua de la Cuenca Alta del Tebicuary, denunció que la situación es crítica por el bajante. Dijo que el Consejo de Agua había establecido un reglamento para el bombeo de agua en época de sequía y eso los arroceros nunca respetaron.
Los empresarios debían tener también los reservorios para juntar agua de lluvia para ser usada en época crítica. Se instaló una regla bajo el puente ubicado sobre el río para controlar el caudal de agua. “Nuestra regla hace tiempo que está fuera del agua y los arroceros siguen bombeando”, dijo Barboza Sisul.
En otro momento, comentó que llamó al Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) para denunciar la irregularidad y que allí le pidieron hacer una denuncia por escrito y que debía recurrir hasta Asunción para hacerlo. Dijo que prefería hacer una denuncia pública.
“Al Mades no le interesa la situación del río”, dijo y que se hace responsable por su denuncia y si querían llevarle preso “no había problema”.
En la zona de la compañía Arequita del distrito de Artigas, departamento de Itapúa, el río se puede cruzar sin problema a pie. En ese punto se encuentra la arrocera Don Petiso, de un tal Krua, quien tiene enormes bombas para captar agua del río que -según los pescadores- están en funcionamiento.
El encargado del mismo, Néstor Javier Godoy, dijo que su patrón dejó de bombear agua hacia los cultivos debido a la bajante, pero que varios de la zona están bombeando agua. Inclusive, hay un desvío hacia los cultivos.
Sin embargo, es difícil llegar hacia esa parte donde se está bombeando a raíz de que las propiedades están bien custodiadas y el río ya no es navegable.
Julio Mareco, director de Fiscalización del Mades, al ser consultado sobre la denuncia, dijo que en breve realizará una verificación y que los arroceros no pueden ahora usar el agua del río.