Tras un trabajo de inteligencia los agentes pudieron ubicar 5 hectáreas de marihuana en etapa de cosecha. En esa misma zona estaban seis campamentos de las personas que trabajan en los cultivos, en estos refugios precarios se hallaron 300 bolsas de marihuana picada.
Asimismo durante el allanamiento encontraron dos prensas rústicas, treinta zarandas, siete gatos hidráulicos y varios enseres que utilizaban los marihuaneros para el procesamiento de la droga. Según el informe de los policías ninguna persona fue detenida.
El lugar donde se encontraba el cultivo ilegal es de muy difícil acceso, los uniformados llegaron al sitio tras una incursión en zonas boscosas.