Ante la situación, desde la cartera de salud instan a no relajar las medidas sanitarias aunque ya no existan las fases de cuarentena estricta. El director de Vigilancia Sanitaria, Guillermo Sequera, también insistió en el cumplimiento de medidas y más testeos para evitar que cifras se disparen
En nuestro país actualmente, una de cada cinco personas que se realiza el test da positivo al COVID-19.
Además, no se descarta la venida de una segunda ola de contagio, que podría controlarse si todos los ciudadanos ponen de su parte en el cumplimiento estricto de los protocolos establecidos.
Si bien es cierto que Paraguay está registrando un enlentecimiento de la pandemia del COVID-19, con un ligero descenso de 17% de casos en las últimas dos semanas, aún se mantiene un ritmo de duplicación de infectados y fallecidos de más de 60 días, así como un progresivo descenso en la ocupación de camas. Pero, no debemos relajarnos, pues este auspicioso escenario podría cambiar drásticamente si se descuidan las medidas sanitarias establecidas.
Guillermo Sequera resaltó que la capacidad actual del país para realizar testeos es cercana a los 5.000 diarios, pero estamos llegando nada más a unos 2.500 a 3.000 testeos, cuyo porcentaje de positividad ronda el 20%. “Esto es un indicador que señala que la epidemia continúa activa y que en cualquier momento puede dispararse si no se toman las medidas”, advirtió el médico.
Por otra parte, rescató que es probable que en los próximos meses tengamos un periodo de menor contagiosidad, debido a la tendencia en descenso que se viene registrando.
Segunda ola
Debido a la dinámica del virus que se observa en otros países, es probable que Paraguay también experimente una segunda ola de contagio.
“Nuestra primera ola llegó tarde, cuando los países del mundo registraban su segunda ola epidémica. Hay toda una curva de aprendizaje del manejo de la enfermedad. Hoy tenemos más certeza del comportamiento del virus que meses atrás, entre abril y julio. Si teníamos en ese tiempo nuestro pico es posible que la mortalidad y el caos serían mucho mayores”, aseveró el doctor.
Refirió que mediante la cuarentena preventiva y la aplicación de fases “compramos tiempo” para postergar el pico de la pandemia.
En las últimas ocho semanas estamos experimentando una meseta. Según señala el epidemiólogo, a medida que las cifras van descendiendo se podrá ver cuál fue el pico de la pandemia.
Sequera considera que Paraguay podría ser uno de los países en demostrar al mundo que es posible domar esta pandemia.
El teletrabajo ayudó
El experto indicó que una de las medidas que está resultando es el teletrabajo (trabajo a distancia), útil para evitar el hacinamiento laboral. Se demostró que se puede tener una productividad igual e incluso mayor para ciertos tipos de trabajo. Existen empresas nacionales que ya venían aplicando esta modalidad en la era pre COVID-19, y con mayor auge se observa a nivel internacional.
El filtro institucional que se realiza en las empresas e instituciones para el control de temperatura y síntomas, es otra medida que no debe dejarse de lado, ya que de esta manera se logra filtrar a la persona enferma para evitar contagios.