La denuncia surge tras el reclamo que elevaron los vecinos de la villa Don Bosco II de Limpio, que la semana anterior se mostraron preocupados por el accionar de la congregación, que tercerizó la venta de unas tres hectáreas de la zona, que también –según recalcaron– forman parte de un proyecto social que surgió en la década del 80.
Actualmente, la congregación es encabezada por el padre inspector Mario Villalba, a quien exigen una respuesta, pero hasta ahora se llamó a silencio. De hecho, los pobladores de Don Bosco se habían manifestado en el 2018 frente el Colegio Monseñor Lasagna a fin de impedir la venta.
Silvino Sandoval, vecino de Mbayué, contó que una inmobiliaria empezó a lotear la propiedad que moralmente –según indica– le corresponde a la comunidad. “Hemos obtenido la personería jurídica para que nos transfieran esas tierras porque ese es el proyecto original (de las obras sociales). El sacerdote salesiano Mario Villalba jamás tuvo en cuenta nuestro pedido. Nos oponemos a esa venta. Pensamos agotar todas las instancias antes de llegar a situaciones extremas. Están vendiendo todo y tememos que vendan también los campos de deportes, los salones comunitarios y las aguaterías que estamos administrando”, manifestó el poblador.
Señaló que no descartan una movilización para que sean escuchados. Consultado sobre el monto de la propiedad, dijo no estar al tanto, pero que hay un rumor de que sería para un barrio modelo. “Todos los sacerdotes que vinieron y administraron la propiedad respetaron las cláusulas, pero Villalba no”, sostuvo.
Por este caso, hasta el cardenal Cristóbal López –según confirmó– envió una carta a los superiores salesianos de Roma expresando su preocupación.
De acuerdo con los datos, se formaron 12 villas en el marco de las Obras Sociales Salesianas, de las cuales 10 se hicieron en Limpio y dos en Capiatá. El hacinamiento de las familias de escasos recursos habría sido el principal motivo de la promoción de estas villas en estas ciudades.